Los centros de menores aprueban el "test de estrés" del Defensor Andaluz

Los centros de reforma juvenil de la provincia de Almería aprueban el particular ‘test de estrés’ del Defensor del Menor de Andalucía. José Maeztu califica de “excelentes” las condiciones de tratamiento y rehabilitación de los menores infractores sometidos a medidas de internamiento en Tierras de Oria, El Molino y Purchena y sólo cuestiona aspectos vinculados a las “medidas de contención” en casos de desobediencia e indisciplina.

Según el informe Atención sobre La atención a menores infractores en centros de internamiento de Andalucía, la provincia cuenta con instalaciones con recursos “buenos” o “excelentes” en espacio, iluminación, climatización, mobiliario, limpieza y recursos para la comunicación con los familiares.

El documento es complejo y profuso en datos. Entre las virtudes del sistema de Justicia Juvenil en Almería, Maeztu reseña la disponibilidad de plazas para chicas. Se trata de un aspecto muy relevante en los últimos años con el crecimiento de las medidas de internamiento para infractoras, especialmente por maltratos en el ámbito familiar y delitos contra el patrimonio (hurtos y robos).

El Defensor del Menor de Andalucía subraya la amplia red de recursos en la provincia. “Almería dispone de una plaza en un centro de internamiento para cada 598 menores”, recoge el informe. Es la mejor tasa de toda la comunidad, un aspecto que influye directamente en el traslado a Almería de menores infractores de otras provincias, en buena parte, jóvenes con sanciones por asuntos graves (la ocupación media es del 95 por ciento en las tres sedes).

Por otra parte, José Maeztu reseña condiciones muy positivas para las comunicaciones con el exterior, siempre bajo el control establecido en los programas de tratamiento individualizados. Tierras de Oria cuenta, por ejemplo, con “una modalidad de comunicación telefónica tanto en el interior como exterior del centro, donde los menores pueden utilizar sus teléfonos móviles propios, en zonas habilitadas al efecto, para tener contacto telefónico directo con la familia”.

Fugas También son positivas las estadísticas sobre seguridad. Durante el ejercicio 2013 sólo se produjeron en Almería tres fugas (28 en toda la comunidad), todas ellas referidas al centro de menores El Molino en la capital. Mientras, las llamados “no retornos” de permisos o actividades fuera de los centros ascienden a siete (cinco en El Molino, instalación que gestiona el mayor volumen de actividades en semilibertad). 

Almería es la provincia que cuenta con mayor número de plazas con un total de 236 repartidas entre Almería, Purchena y Oria. Cádiz tiene 204, Sevilla 129 y Córdoba 120. Son las mejor dotadas para el tratamiento  juvenil. Sólo en la provincia trabajan 400 personas en programas de reinserción vinculados a los centros de reforma.

Maeztu visitó la Fiscalía de Menores y los centros de Almería a mediados del pasado mes de septiembre. Fue la última ronda de inspecciones a las instalaciones de la comunidad autónoma antes de la presentación del informe.

Hasta el mes de septiembre 215 jóvenes cumplían medidas de internamiento o de régimen semiabierto en Almería, adscritas a la Consejería de Justicia e Interior y gestionadas por las entidades Ginso (Oria-Purchena) y Meridianos (El Molino).