¿Qué resultado electoral espera?
Estoy convencido que vamos a sacar mejor resultado del que dicen las encuestas. Con la líder tan potente que tiene el PSOE en Andalucía, si no sacamos mayoría absoluta nos vamos a quedar muy cerca y vamos a poder gobernar solos.
¿Temen el impacto en las urnas los llamados partidos emergentes?
No. La gente de la calle no es tonta y apuesta por partidos políticos solventes, con capacidad de gobernar. En el caso Podemos no se sabe qué quieren hacer porque no lo dicen, entran en contradicción y no se sabe si son de izquierda o derecha. Ahora están diciendo que son socialdemócratas, es decir, del PSOE. No va a ningún sitio. Y sobre Ciudadanos... realmente tienen muy poca implantación en Andalucía y no creo que tengan éxito.
Haga balance de sus tres años de gestión.
En primer lugar, hemos actuado sobre la organización racional de las plantillas. Aprobamos el decreto de Oficina Judicial y Fiscal y negociado con los sindicatos para avanzar en la expansión a través de unas bases generales. Y estamos negociando la relación de puestos de trabajo para los proyectos en Sevilla, Vélez-Málaga y El Ejido. Sobre los medios materiales, hemos modernizado el parque informático, sustituyendo los viejos ordenadores por equipos modernos que van a permitir la interconexión de órganos judiciales y fiscales y la interoperatividad. Estamos también generando nuevas aplicaciones como Lexnet, un sistema de comunicaciones telemáticas que el año que viene estará en todos los órganos andaluces, y el sistema Jara, que va a ser utilísimo en la nueva Oficina Judicial. Es un instrumento para seguir la ubicación concreta de un procedimiento. Y al mismo tiempo, para evitar que se inunden juzgados de papel obsoleto, reforzamos la Junta de Expurgo.
Pero la nueva Oficina Judicial no está implantada. ¿El problema ha sido la negociación con los sindicatos?
Sin duda. Ahí hubo un malestar de alguien que intencionadamente difundió la idea de que realmente la Junta quería eliminar funcionarios, despedir a muchísimos interinos y hacer nuevos recortes en los salarios. Y me costó mucho desmontar todo eso sobre la base de reunirme uno a uno con los sindicatos.
La Cámara de Cuentas alertó de un sobrecoste en la construcción de la Ciudad de la Justicia de un 35%.
Mire, normalmente ninguna obra termina encajando en el presupuesto. Pasa en las obras domésticas. Se dice “pues ya que estamos...”. Eso significa que se incrementan los costes. Se detectan necesidades y mejoras en el proyecto que hacen que se modifique el presupuesto. Es normal.
¿Hay alguna posibilidad de reformar el Palacio de Justicia de Almería?
Sin duda. En cuanto tengamos presupuesto, por mínimo que sea, atacaremos esa sede para atajar sus males.
¿Cómo explica que asuntos de corrupción como el Caso Poniente tarden tanto en resolverse? ¿La solución pasaría por una instrucción llevada por fiscales?
La Constitución dice que los jueces tienen que juzgar y ejecutar lo juzgado, pero no dice que deban investigar. Pero en España la Ley de Enjuiciamiento Criminal, del año 1882, sigue encomendando la investigación de los delitos a los jueces. Sólo pasa en España. Si vemos lo que dura una investigación dirigida por las Fiscalías en cualquier país de Europa, no tiene nada que ver. En España los jueces tienden a extender la instrucción porque son dueños de su tiempo y se enredan, muchas veces, en cosas que no merecen la pena. Lo vemos cada día.
¿No teme injerencias en la investigación?
No, no. Los fiscales son muy profesionales y no crea que se dejan manejar fácilmente por el poder político. Ya ha visto que el último Fiscal General de Estado dimitió... eso sí, por motivos estrictamente personales, claro. No soportó las presiones del Gobierno y dijo “ahí os quedáis”.
¿Faltan jueces?
Por supuesto. La ratio de jueces por 100.000 habitantes en Europa es de 21,1. En España es de 11,1. Y en Andalucía es de 10,5. No me explico las diferencias en un mismo país. Pero así estamos. Pedimos al Gobierno que se duplique el número de jueces y fiscales.
Me dijo en una ocasión que no compartía nada de la gestión de Gallardón. ¿Ahora con Catalá hay puntos de encuentro?
Hay más diálogo, pero no le va a dar tiempo a hacer nada. Queda menos de un año para las elecciones. Todos los grandes proyectos que podían servir para resolver los problemas estructurales de la Justicia no los va a poder poner en marcha. Hace falta ampliar el número de jueces. Con el gobierno socialista se convocaban 400 plazas al año y con Gallardón cero el primer año, 50 el segundo y 100 el tercero por la ‘presión horrible’. Con eso no se cubren ni las bajas por jubilaciones y defunciones en la carrera. Ahora tenemos menos jueces que en 2011.
Como miembro de la Junta de Andalucía, ¿desea un pronto ascenso de la magistrada Mercedes Alaya?
Me da igual, mi preocupación es toda la Justicia en Andalucía. Ni quiero que se vaya ni que se quede.
¿Cómo está de medios ese juzgado?
Como ninguno en Andalucía, le doy mi palabra.
¿En Tierras de Oria se maltrata a menores?
No, en absoluto. La denuncia procede de la filtración a los medios, de manera interesada, por parte de una persona que estuvo internada en Oria, de un vídeo manipulado absolutamente falso. Cuando el juez recibe la denuncia no imputa a Tierras de Oria sino a quien difunde el vídeo.
¿Están al día en el pago a los abogados de oficio?
Totalmente al día. No había pasado en 40 años.
¿Han pensado en devolverles el 10 por ciento que les quitaron con los recortes?
Cuando cambie la situación, lo pensaremos. Ahora mismo no podemos hacerlo. Fueron recortes que nos impuso el Gobierno de Madrid. Cuando podamos manejar otras cifras tendremos que devolver muchas cosas que la gente ha perdido. El propósito de la Junta es que lo que se ha perdido por la crisis sea recuperado cuanto antes.
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