Vecinos de la calle Marqués de Comillas y su entorno han solicitado por escrito al Ayuntamiento de Almería el cierre temporal de una discoteca situada en la citada calle hasta que “solucione los problemas de insonorización”. El local de ocio tiene licencia y todo el papeleo en regla, señalan desde la gerencia de Urbanismo que ha abierto varios expedientes y que ahora ha solicitado el registro del medidor de ruidos que se exige a este tipo de establecimientos y que funcionaría como el tacómetro de un vehículo. “Es una forma de conocer si se cumple la ley de ruidos y no se eleva el volumen de la música por encima de lo permitido”, explican fuentes municipales.
Al parecer han sido varias las denuncias vecinales por ruido en los últimos meses y, hasta la fecha, los agentes de Policía Local que han acudido a comprobar el volumen y la insonorización del local no habrían detectado ningún incumplimiento de la ley.
Situación que no convence a los vecinos que insisten, por su parte, en que a determinadas horas se retirarían los controles de insonorización y la música se escucha muy por encima de lo permitido. De ahí, la urgencia a la hora de pedir el citado registro de sonido. Una petición que ya estaría realizada por parte del Ayuntamiento y que permitirá conocer el volumen de la música en el local durante los últimos meses.
Los plazos de tramitación de expedientes y los que tienen los responsables del local para entregar la documentación son lentos y prolongados en el tiempo para unos vecinos que “no descansan”.
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