“Aquí en el campo base avanzado del Makalu, aunque se ha notado mucho el terremoto principal y después de él varios más, estamos todos bien”. Con esta frase, el alpinista ejidense Eduardo Ibero Cobos quiso tranquilizar a familiares y amigos a través de su perfil en Facebook tras el devastador terremoto de 7,8 grados en la escala Richter que ayer desoló Nepal, causando cerca de 1.500 fallecidos y más de un millar de heridos.
Ibero Cobos, que trabaja como funcionario de Correos, es un veterano montañista de 52 años que acumula varias décadas de experiencia en este deporte. Este mes emprendió su nuevo desafío: llegar al Makalu, en Nepal, un pico de 8.643 metros de altitud, el quinto más elevado de la tierra y uno de los catorce ‘ochomiles’.
El seísmo le sorprendió en el campamento base avanzado, a 5.680 metros de altura. Junto a él, el andorrano Domingo Trastoy, su compañero en la travesía hacia el Makalu, y otros deportistas españoles que también estaban en el citado campamento, como el alpinista catalán Ferrán Latorre, la asturiana Eva Zarzuelo y la corredora de ultratrail catalana Núria Picas. Según la edición digital del diario ‘Marca’, cerca de cincuenta alpinistas de todo el mundo se encuentran en el Makalu.
“Si en este país no se hablara tanto de fútbol conoceríamos a gente como Eduardo. Deportistas aficionados que llevan toda su vida practicando este tipo de actividades”, decía ayer a LA VOZ un alpinista catalán que conoce al almeriense y que estuvo cerca de unirse a esta expedición.
Eduardo Ibero pudo conectarse a Facebook horas después de conocerse la magnitud del seísmo. En Nepal, las comunicaciones son difíciles pero el ejidense intenta ir reflejando en esta red social, con textos e imágenes, cómo se va desarrollando la expedición. “Un saludo desde el campo base hilar y en el Makalu a 5.000 metros. Ahora toca aclimatar muy bien y en dos días subir al campo avanzado a instalarnos”, escribía el domingo 19 de abril.
Sin ayudas
El almeriense cuenta en su blog los detalles de la expedición al Makalu, un proyecto que preparó junto con Domingo Trastoy “sin ninguna ayuda ni colaboración ni publica ni privada”. Aunque destaca que ambos poseen “una dilatada experiencia en este deporte”, Eduardo Ibero señala que el viaje y el intento de coronar este tipo de montañas requieren “una preparación burocrática y de logística complicada pero sobre todo muy exigente física y mentalmente de los participantes”.
El blog, que muestra algunas de sus ascensiones a picos de Perú, China o Nepal, entre otros, recoge al milímetro todos los aspectos de un viaje que hoy es noticia. “A nuestra llegada [a España] y después de las escalas correspondientes solo tendremos que llegar a nuestros domicilios y volver a la actividad diaria normal”, culmina su ‘hoja de ruta’. Sin duda, el regreso a Almería de Eduardo Ibero será en esta ocasión más feliz que nunca.
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