El hospital Torrecárdenas está inmerso en la obra de ampliación de sus cocinas. Unas instalaciones en las que cada día se preparan cuatro comidas para más de 750 pacientes. En total, más de 70 menús diferentes en función de las necesidades de cada una de las personas ingresadas.
La ampliación del espacio de las cocinas, que estará lista en menos de dos meses, permitirá instalar una segunda cinta de emplatado, una cocina dietética (para el preparado de dietas especiales para pacientes alérgicos), una zona de estar para el personal y otra administrativa, explica la responsable de la sección de Confortabilidad e Infraestructuras del complejo hospitalario, Toñi Torres Aguirre.
Una cocina más grande va a favorecer el hecho de que Torrecárdenas cocine ya para todo el complejo sanitario, incluido el Hospital de Cruz Roja. Se sirve entonces la comida a los ingresados también en la Bola Azul y en el Hospital Provincial (donde se sirve la comida a los menores atendidos en el hospital de día de Salud Mental Infantojuvenil).
73 códigos de menús Los menús, que se organizan con cadencia semanal, están adaptados a cualquiera de las opciones dietéticas. Sin gluten, sin cerdo, sin lactosa, sin sal, sin potasio, basal, en puré... Y después, van todas estas opciones y otras más, cruzadas. Y a los más de 70 menús codificados, se añaden, siempre que es necesario, las observaciones marcadas en el menú por el personal de enfermería y que pueden variar sólo para una de las comidas.
Y no sólo se ofertan los menús (mini carta incluida con más de tres primeros, tres segundos y tres postres a elegir si el paciente no tiene restricción dietética) a los pacientes, también llegan bandejas de comida a un centenar de acompañantes. Es el caso, recuerda Toñi Torres, de los padres de niños ingresados y de los cuidadores de personas dependientes “siempre y cuando sean titulares de la Tarjeta +Cuidado”.
Revisar todas las bandejas Seis dietistas se encargan de revisar, una a una, todas las bandejas que salen emplatadas desde las cocinas del hospital para evitar que ningún paciente tome lo que no debe y, al revés, para que todos coman lo que mejor y antes les va a ayudar a recuperarse.
Estas seis dietistas son Sonia Chica Palomino, Carmen Molina Suárez, Antonia Martínez, Isabel García Romero, Cándida Aparicio Aguilera y Mariana Sevilla Sevilla. Y todas ellas, se encargan, de supervisar todas las bandejas y cuatro veces al día (desayuno, comida, merienda y cena).
El mimo que todo el personal vinculado con la cocina pone en los menús se nota en las encuestas de satisfacción en las que se ha ido mejorando la nota que los pacientes dan al menú. Y eso que, dicen sus responsables, “cuando uno se encuentra enfermo, pocas veces le apetece nada fuera de su casa”.
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