Los jueces favorecen el “principio de intervención mínima” y apuestan, cada vez con mayor frecuencia, por medidas alternativas a las condenas de prisión. El año pasado los órganos penales de la provincia de Almería acordaron la suspensión de 200 condenas y reforzaron otros caminos punitivos como la sustitución de la prisión por multas económicas o los trabajos en beneficio de la comunidad (TBC).
La ley permite estas soluciones alternativas especialmente en delitos menores. En el caso de las “suspensiones” los jueces pueden dejar en paralizar la ejecución de las penas privativas de libertad no superiores a dos años y siempre que no exista reincidencia en el futuro (los plazos de este condicionamiento varían según el delito).
De este modo, unos 200 almerienses esquivaron en 2014 el paso por El Acebuche, según datos recogidos por la Memoria del Ministerio del Interior.
Además, otros 1.300 ciudadanos residentes en la provincia de Almería sustituyeron sus condenas por trabajos en beneficio de la comunidad o, simplemente, recibieron esta obligación como castigo por sus delitos.
Trabajos sociales Los TBC se gestionan desde el centro penitenciario El Acebuche, aunque los afectados no pasan por sus celdas salvo en contadas excepciones (casos en los que cumplen prisión por un delito y trabajos comunitarios por otro, al mismo tiempo).
El año pasado, según estadísticas del Ministerio del Interior, los jueces andaluces ordenaron 13.000 medidas para trabajos comunitarios en la comunidad autónoma, a través de los servicios de gestión de diez centros penitenciarios.
Según informes de Instituciones Penitenciarias (II PP), en torno a una cuarta parte de todos los TBC corresponden a los delitos vinculados a la violencia de género donde, de forma paralela, se imponen restricciones de comunicación con la víctima, comparecencias personales periódicas y la obligación de participar “en programas formativos, laborales, culturales, de educación vial, sexual, de defensa del medio ambiente, de protección de animales y de otros similares”, señala II PP.
Sanción El objetivo es que los ciudadanos que hayan cometido algún delito reciban una sanción por ello, pero que, al mismo tiempo, el sistema punitivo sea proporcional a las circunstancias y permita soluciones constructivas para la reeducación como la posibilidad de colaborar con proyectos sociales.
Según cifra el Ministerio el Interior, en el ejercicio 2014 se desarrollaron a través del servicio de gestión de la cárcel en Almería 246 programas.
Consulte el artículo online actualizado en nuestra página web:
https://www.lavozdealmeria.com/noticia/12/almeria/87336/los-jueces-suspenden-200-condenas-y-apuestan-por-medidas-alternativas