La fuerte conexión que existe entre los almerienses y el Mediterráneo es una de las esencias de la ciudad y les otorga algunas de sus principales características. Por ello, el Área de Turismo del Ayuntamiento de Almería ha estrenado este verano una nueva ruta, dentro de su habitual programa de visitas guiadas, en la que la tradición marinera es la protagonista. ‘Almería pesquera. La lonja’ reunió el pasado 31 de julio, a más de 50 participantes, que pudieron vivir en directo la subasta diaria de pescado en la lonja del Puerto y conocer de primera mano desde las embarcaciones típicas almerienses hasta algunas de las técnicas más utilizadas históricamente en el arte de la pesca de la ciudad.
“Este es el primer verano que se organiza esta ruta, que realizamos por segunda vez. La visita está teniendo muy buena acogida entre los participantes, ya que el funcionamiento de la lonja despierta curiosidad y es algo que no se puede ver todos los días” explica Carmen, una de las guías oficiales de la Oficina de Turismo del Ayuntamiento, situada en la Plaza Vieja.
Con el olor salino del mar acompañando en todo momento, la visita a la lonja partió del restaurante El Varadero, punto de encuentro de los participantes, y se adentra en la rutina de la lonja. Este espacio, un gran desconocido para muchos, es uno de los pulmones de la capital, ya que Almería es una ciudad volcada al mar. Además de ver la subasta que se realiza a diario en esta instalación del Puerto, a lo largo de la visita se explicó el proceso por el cual se compran las cajas de pescado y se etiquetan perfectamente, para que la cadena de trabajo sea fluida y ágil.
Artes pesqueras
Tras conocer el día a día de la lonja, los visitantes hicieron un pequeño recorrido por sus alrededores, en el que las guías de la Oficina de Turismo dieron infinidad de detalles sobre el arte pesquero almeriense. Datos sobre el arrastre, método de pesca mayoritario en la zona, o sobre la posidonia, que habita los fondos marinos de la costa almeriense, fueron solo algunas de las explicaciones ofrecidas con el Faro de San Telmo, patrón de los pescadores, como telón de fondo. Paseando por el muelle para poder contemplar las embarcaciones tradicionales de la ciudad, la ruta continuó desgranando las tradiciones y el estilo de vida de los pescadores. Especial importancia se dio también al propio pescado, enumerando algunas de las especies más comunes y sabrosas de la zona, parte también de la tradición gastronómica almeriense, así como trucos útiles para saber si el pescado es fresco o no.
Para finalizar la visita con una imagen muy marinera y característica de la ciudad, el grupo se despidió en el muelle con una bella estampa de fondo: el mar, los barcos, y sobre ellos el colorido barrio de La Chanca y la Alcazaba.
Desde la Organización de Productores Pesqueros Asopesca, su gerente explica que el ayuntamiento de Almería ha atendido con esta ruta turística una de sus peticiones. “La iniciativa fue nuestra, así que estamos encantados”, refiere.
Justifica la necesidad de que se conozca el trabajo de la lonja y de los pescadores refiriendo que “Almería es una ciudad marinera, con muchos kilómetros de litoral” y que, “por desgracia, el sector pesquero ha estado siempre ajeno”. Por ello ve necesario y muy útil que “la actualidad de nuestros marineros y profesionales la acerquemos así a los ciudadanos, desde cómo se comercializa, qué embarcaciones se usan y que capturas se hacen”, entre otras cuestiones.
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