Isabel Juan: “Los almerienses somos muy pijoteros”

Encantada de tener su contraportada en LA VOZ, Isabel Juan Rodríguez -y no ‘De Juan’ como acostumbramos a llamarla-, es gerente de la Asociación de Hosteleros de Almería desde hace ya unos cuantos años. Nació en el año 64 y salvo los cinco años que pasó estudiando fuera, lleva toda su vida viviendo y trabajando en Almería, donde nació. Trabajadora infatigable y mujer de talante negociador, ayer estaba especialmente contenta después de haber visto los datos de alojamientos y de los bares y restaurante de la capital que le habían facilitado, porque han mejorado considerablemente y cuando nadie lo esperaba.

Se dedica en exclusiva a la gerencia de Ashal  y la asociación tiene más de 500 socios de negocios repartidos por la amplia geografía de la ciudad. A todos se debe y para todos trabaja. Dice que su trabajo, el de Ashal, es un trabajo silencioso; pero que si la asociación no existiera habría que crearla, porque gracias a la labor que realiza se van dando pasos en beneficio de todos.  Ella llegó a la gerencia en el año 1992, concretamente en agosto. La asociación llevaba funcionando desde el 77.

Desde que ella está al frente de la asociación no había vivido una crisis que ni por asomo se pareciera a esta, “porque ha vaciado durante estos últimos siete años las reservas de los hosteleros”. Cree que la hostelería de Almería es de calidad. “A mí me satisface mucho, porque los almerienses somos muy pijoteros”, dice. “Tengo muchas disputas con mis amigos cuando empiezan: esto no pasaría en no sé donde, mira lo que me han dado, en mi tierra es mejor, porque lo que dicen las encuestas es que el grado de satisfacción de quienes nos visitan, comen y pasan aquí sus días de descanso es que están satisfechos con el servicio y la calidad de los productos. Estamos por encima de la media de Andalucía y casi somos los mejores”, afirma con contundencia. Otra cosa son cuestiones como el transporte, la limpieza de la ciudad, los cortes de luz, como los que ha habido en Níjar y que son la peor imagen turística que podemos dar,... Eso son otras historias.

Cuando se sientan frente a los responsables municipales les reclaman un poco de todo. “Les pedimos 100 siendo conscientes de que si logramos 20 ya podemos estar satisfechos, pero se han logrado muchas cosas”, cuenta.  Cosas que piden y se les dan: horarios especiales para fiestas especiales, y eso nos costó pero lo conseguimos.
Pendientes hay algunas cosas. Reconoce que el tema de  la limpieza es fundamental y en eso “son a veces lentos”. “Recuerdo una queja que hubo hace unos años en la calle Jovellanos con varios contenedores que no daban para todos los bares que había allí y hasta que no se cambió de concesionaria no se solucionó el tema”, refiere.

Con el tema de la feria, pues algo más de lo mismo. “Con el mercadillo de los martes en El Alquián también tenemos nuestra guerra, porque llegan los turistas al aeropuerto  y pasan por el mercadillo y se encuentran un bolserío... Tendríamos que tener muchas cosas más en cuenta para verlas con los mismos ojos con que los ve el turista”, añade.
Tiene que claro que Almería ofrece tranquilidad -con excepciones-,  y que es ideal para el turismo familiar. “No hay otra zona con las características que tiene nuestro Parque Natural Cabo de Gata, al menos en España. Solo eso ya justificaría un viaje a Almería. Además aquí se come bien. Si yo fuera un catalán o un madrileño me vendría a Almería tan alegremente, porque es un sitio especial”, afirma Isabel Juan.

Quiere que  se amplíe la temporada de playa a seis meses, con las playas en perfecto estado, “porque la temporada en Almería no puede durar dos meses”. La iluminación del Paseo Marítimo yase ha solucionado; pero quedan cosas por subsanar y hace falta más presencia policial de manera constante en el casco histórico. Así que a seguir luchando.