Cortan los enganches ilegales en Villablanca

Operarios de Endesa regresaron el jueves al barrio capitalino de Villablanca para eliminar las conexiones irregulares a la red eléctrica en el entorno de tres residenciales. Los trabajadores detectaron enganches ilegales realizados por okupas asentados desde hace años en las viviendas tipo dúplex y se emplearon desde primera hora de la mañana para reparar el cableado afectado.

La empresa encargada del suministro eléctrico y la concesionaria de aguas Aqualia han acudido periódicamente a La Vaguada para frenar los enganches ilegales de una veintena de okupas afincados en tres promociones de viviendas,   atrapadas por la crisis económica y vendidas sólo parcialmente.

No se trata de una cuestión de fraude en el fluido eléctrico únicamente. Los enganches en la red eléctrica de las calles se hacen de forma rudimentaria, improvisada y con un grave riesgo para la seguridad de los ciudadanos.

Los operarios eliminaron las conexiones e, incluso, sellaron las arquetas para evitar que los vecinos puedan tener acceso sencillos a los nudos de la red eléctrica pública. Eso sí, tuvieron que contar con apoyo de agentes de la Policía para prevenir posibles incidentes.

Además, la Policía Local de Almería escoltó a personal municipal para explorar las farolas del sistema de alumbrado público en la Avenida de Torrecárdenas y para soldar las puertas como medida para evitar que manipularan el interior de las estructuras. 

Antecedentes

Las empresas ya actuaron con dureza el pasado mes de marzo cuando cortaron el agua y la luz a los okupas tras detectar un fraude masivo en   Villablanca. Algunos residentes aún no han recuperado el suministro de agua corriente y han buscado métodos alternativos para llevar agua a las casas. 

Las viviendas acogen a familias completas y, cada vez con mayor frecuencia, a personas que pagan un alquiler a otros okupas que se apoderaron del inmueble y ahora sacan partido económico a unas propiedades que nunca pagaron. 
Los seis Juzgados de Instrucción del partido de Almería se han repartido una veintena de casos denunciados por el propietario legal de los inmuebles, la Sociedad de Gestión de Activos Procedentes de la Reestructuración Bancaria (Sareb), conocido como el Banco Malo.

Según adelantó LA VOZ DE ALMERÍA, el Juzgado de Instrucción número Dos de Almería decretó esta semana la primera orden de desalojo judicial de una propiedad okupada en Villablanca. El juez Hernández Columna decretó un plazo de 15 días para el abandono de la propiedad a sus actuales residentes. Aunque el resto de asuntos se dirime uno a uno, caso a caso, la orden de lanzamiento dictada por el Instrucción Dos sienta un precedente para resolver la situación de los allanamientos de la inmuebles en el entorno.