Decir que las próximas elecciones generales son las más abiertas de la historia de la democracia española se ha usado tanto que se ha quedado casi sin sentido, pero lo cierto es que con la apertura de las posibilidades de voto todo es tan incierto que la sorpresa está asegurada.
Tanto es así, que desde las diferentes formaciones políticas se está analizando al milímetro dónde se encuentra su nicho de voto con la intención de afianzarlo. Y es que hay tres grupos que van a marcar el devenir de los comicios: los más jóvenes sobre todo los que se incorporan a votar, los ‘treintañeros’ (estableciendo una franja que iría desde los 25 años hasta los 44, tomando como referencia las franjas utilizadas en la mayoría de las encuestas), y los mayores de 65 años.
El voto más complicado y más disputado es precisamente el de la franja que va desde los 25 a los 44 años que en Almería supone el 36,8% de los electores que están llamado a las urnas el 20D. Y es que la guerra se juega entre la nueva y la vieja política, no solo entre los diferentes partidos que concurren.
Criterios
Todos han tenido oportunidad de votar antes y son un voto volátil, es decir, suelen decidir con criterios más vinculados a su situación y no solo emocionales. Además, la llegada de los nuevos partidos como Ciudadanos y Podemos les permite un cambio sin tener la sensación de traicionar al votar al rival.
Teniendo en cuenta los datos del CIS y la encuesta realizada por Deimos Estadística para La Voz de Almería, esta franja de edad muestra una auténtica lucha con conseguir el voto. Los partidos clásicos rondarían el 40% de los votos y los emergentes casi también. Entre los 25 y 34 ganan los emergentes por la mínima; entre los 35 y los 44 pasa al contrario.
En Almería lo cierto es que serían PP y Ciudadanos los que se llevan el gato al agua, y entre ellos pugnan por el primer puesto.
Jóvenes
En el caso de los más jóvenes, los que tienen entre 18 y 24 años, los partidos emergentes son sin duda la opción predilecta.
El no haber tenido en muchos casos la oportunidad de votar y fidelizarse con un partido en otros comicios, les permite contar con una mente más abierta.
Así, en Almería, según la última encuesta de Deimos, casi el 60% de esta franja de edad apostaría por votar a Ciudadanos o Podemos, cierto es que la formación naranja lidera con diferencia. Sin embargo, los dos partidos clásicos se quedan con apenas el 30% de los votantes.
En estos comicios son un total de 43.951 almerienses jóvenes los que están llamados a las urnas, el 9,7% de los electores del 20D.
Estabilidad
Convencer a una persona mayor de 65 años de que cambie el sentido de su voto es tan complejo como pedirle a alguien que lleva todo la vida comprando un producto que se pase a la marca blanca. Es algo que puede conseguirse, hay muchas amas de casa que ante la crisis han optado por abandonar su detergente por el más barato, pero siempre viene acompañado de una decepción previa.
Las bajadas de pensiones, sensación de desatención, mala situación del resto de miembros de su familia son quizá los argumentos más claros que le pueden hacer cambiar su voto. Pero lo cierto es que sean votantes del PP o sean del PSOE, lo normal es que el trasvase de votos sea entre una formación y la otra pero es difícil que se vayan a los partidos emergentes.
Seguridad
Desde las propias formaciones políticas explican que en la mayoría de los casos las personas mayores apuestan por “la estabilidad” que dan las formaciones más tradicionales al menos en un primer momento.
En las elecciones generales del próximo 20 de diciembre son 89.624 almerienses los mayores de 65 años que están llamados a las urnas, lo que supone el 16,51% del electorado de la provincia. Se trata de un porcentaje alto, por lo que, también se trata de una franja a tener en cuenta.
En el último CIS, los mayores de 65 años a nivel nacional mostraban su preferencia en un 33,7% por el Partido Popular y en un 23,1% por el Partido Socialista. Efectivamente ratifica la apuesta por los partidos clásicos con más del 60%.
En la encuesta realizada por Deimos para La Voz, se mostraba que más del 75% de los almerienses de esta franja de edad votarían a los partidos clásicos. Ciertamente en Almería la diferencia entre populares y socialistas según el sondeo sería del 20%.
Sin embargo, los partidos que ahora se incorporan al panorama, es decir, Ciudadanos y Podemos, superarían el 10% en el CIS, y en la encuesta realizada para La Voz ni siquiera llegaría a ese porcentaje.
Lo cierto es que lo que queda de campaña electoral será toda una guerra abierta entre los dos grandes partidos para no perder este voto fiel, y para conseguir revertir el que tiene el contrario. Y es que, los partidos emergentes llegan con fuerza y los tradicionales tratarán de buscar en todos sus feudos como luchar, quedan aún más batallas.
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