En período de reflexión se encuentra el pulso laboral que mantienen los trabajadores y dirección de la empresa concesionaria del suministro de aguas de Almería, Aqualia. Con la llegada de estas fechas navideñas el comité de empresa decidió suspender el calendario de movilizaciones. Hasta la víspera de Nochebuena las posturas eran inamovibles; los trabajadores reclaman un subida salarial de entorno al 7% alejada del 1,5% que pone sobre la mesa la empresa. Un atasco en las negaciones que puede tener en el Ayuntamiento de Almería la clave para seguir avanzando.
Así lo creen desde los representantes de los trabajadores quienes, en la jornada de ayer, mantuvieron un encuentro con el alcalde de la ciudad, Ramón Fernández-Pacheco y el concejal de Servicios Urbanos y Fomento, Manuel Guzmán. La reunión se saldó con la predisposición del gobierno municipal de intermediar en un conflicto que si bien, según el primer edil “no deja de ser una cuestión entre una empresa y sus trabajadores”, pueda afectar a los ciudadanos en un suministro tan importante como es el del agua. Según Fernández-Pacheco desde el Consistorio se aspira “a ayudar para que se pongan de acuerdo”.
Los trabajadores de Aqualia comenzaron una huelga indefinida el pasado 17 de diciembre. Sobre la mesa la empresa propone una subida salarial de un uno por ciento para el año 2015 y un 1,5 por ciento para el año 2016, lo que supone colocarse en la cifra más alta de la banda marcada por el III Acuerdo para el Empleo y la Negociación Colectiva.
Por su parte, desde el Comité de Empresa Manuel Hernández, CCOO, recuerda que el Acuerdo tienen un “carácter orientativo” y que las demandas se plantean en virtud de “cada empresa” y en este caso “es asumible por su buena situación económica”. Además, Hernández califica el incremento solicitado de “compensación para los trabajadores que llevan desde el año 2012 con congelación salarial”.
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