La famosa administración de lotería ‘La Bruja de Oro’ (La Bruixa d’Or en catalán) ha decidido trasladar su sede social y fiscal de Cataluña a Navarra, según anunció ayer su propietario, Xavier Gabriel, tras verse obligado la semana pasada a publicar en Twitter un cartel con la mítica bruja asegurando “Amo Catalunya y me siento española. No estoy a favor de la independencia”.
Gabriel trataba de responder así al boicot que, según señaló, estaba sufriendo por una serie de bulos que afirmaban, entre otras cosas, que era independentista y padre de la diputada de la CUP Anna Gabriel.
El dueño de ‘La Bruja de Oro’ apuntó que trabaja y paga sus impuestos al Gobierno central, pero denunció que desde hace 15 días “el Gobierno de aquí me está persiguiendo, machacando... He ido aguantando y como ser humano que soy ha llegado el momento que no he podido más y he estallado”.
El caso de famosa la administración de Lotería se une al imparable éxodo de empresas que han decidido trasladar su sede social fuera de Cataluña ante la incertidumbre política y jurídica que está provocando el proceso independentista se acelera.
Después de que el martes uno de los iconos catalanes, Codorníu, decidiera no esperar al desenlace del procés para irse como había anunciado en un primer momento, otra de las firmas clásicas de la región ha decidido seguir sus pasos. Pastas Gallo ha decidido cambiar su sede de Granollers en Barcelona a El Carpio, en Córdoba, donde tiene su mayor fábrica.
Como está siendo habitual en las últimas semanas, la compañía ha justificado su decisión basándose en que “necesitan operar en un ambiente de estabilidad” y “garantizar la seguridad jurídica y los intereses de los consumidores, clientes, empleados y accionistas”.
Fuga imparable
En apenas dos días, la cifra de entidades que se han marchado de Cataluña por la deriva secesionista ha aumentado en unas 150, arrojando un total de 700 compañías que han trasladado su domicilio social fuera de la comunidad autónoma desde el 2 de octubre, un día después del referéndum ilegal. Se trata de los datos que va actualizando el Colegio de Registradores y reflejan que el castigo a la imagen de la economía catalana no se detiene.
En el mismo periodo, solo se han mudado a Cataluña 38 empresas, de modo que el saldo negativo se sitúa en las 662 empresas. Los nuevos datos actualizados incorporan lo que ocurrió en los registros mercantiles de toda la comunidad el viernes 13 de octubre y el lunes 16. En el 13 se fueron 81 compañías del conjunto de Cataluña. En el 16 de octubre abandonaron la región 68 empresas, según estos datos todavía provisionales. La mayoría de las empresas que se va fuera de la comunidad catalana procede de la provincia de Barcelona. Entre las entidades que han informado su traslado fuera se encuentran grandes corporaciones como Planeta, Gas Natural, CaixaBank, Sabadell, Abertis, Catalana Occidente, Cellnex, Applus, eDreams Odigeo, Bimbo o Torraspapel. A ellas se han unido en las últimas 48 horas Codorníu o Pastas Gallo.
Rebaja de crecimiento
Por su parte, la CEOE ha rebajado dos décimas, hasta el 3%, su previsión de crecimiento de la economía española para este año, según informó ayer martes la patronal, que en julio había pronosticado un alza del PIB del 3,2%.
La previsión de la CEOE es una décima inferior a la estimada por el Gobierno central, que en el Plan Presupuestario remitido ayer a Bruselas elevó desde el 3% al 3,1% su proyección de PIB para este año, aunque rebajó del 2,6% al 2,3% la de 2018.
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