Tu salud y tu bolsillo sufren la falta de lluvia

Los cielos de la Península Ibérica van a seguir unos días más sin nubes que anuncien las necesarias lluvias. El anticiclón no deja llegar por ahora borrascas y la falta de precipitaciones y de viento se traduce en que no se limpian los contaminantes del aire que respiramos. Seguimos en una situación de inversión térmica, con frío de noche pero temperaturas más que agradables en las horas centrales de día, lo que provoca una especie de tapa de olla que impide la limpieza del ambiente.

Estas condiciones climáticas se suman a la contaminación urbana y dan lugar a un problema directo para nuestra salud; según los expertos, se multiplica el número de virus presentes en el ambiente. Los resfriados y la gripe amenazan con regresar este invierno con más fuerza que nunca a causa de la severa falta de lluvia y de las altas temperaturas, que aumentan el número de virus presentes en el aire. Al no llover, las partículas en suspensión, las más peligrosas para la salud humana (la Agencia Europea del Medio Ambienteles atribuye 16.000 muertes prematurasal año en España), permanecen depositadas en el aire, al igual que los virus. El 35% del origen de estas partículas peligrosas presentes en el aire que respiramos está en los coches, 20% en la industria y 15% en la construcción.

También nuestro bolsillo nota ya las consecuencias de la falta de lluvia, según la Cadena Ser. La Unión de Consumidores de Galicia ha calculado que en el último mes la lista de la compra y la factura de la luz han sido un 7% más caras. Esta asociación de consumidores recuerda que la subida en el recibo eléctrico se produce desde el momento en el que la producción hidroeléctrica no tiene casi presencia porque el nivel de los embalses es mínimo. También se nota en el precio de la cesta de la compra. Aseguran que se ha encarecido el precio de las hortalizas un 7% y el de las frutas, un 6,5%.

En cambio, los aparcamientos privados en Madrid están haciendo el agosto por las limitaciones de aparcamiento en la ciudad, que mantiene activado el protocolo anticontaminación y solo pueden aparcar en el centro los residentes. Los aparcamientos privados están más llenos que nunca a pesar de que desde el Ayuntamiento casi se suplica que se evite coger el coche y se anima a usar transporte público.