El aceite de oliva virgen extra como fuente de salud

Las demandas de los consumidores de alimentos beneficiosos para la salud humana suponen una interesante oportunidad de negocio para un amplio abanico de productos mediterráneos como el aceite de oliva virgen extra. 

La aceitera Castillo de Tabernas ha absorbido esta filosofía y desde hace años trabaja con el objetivo de exponer todas las propiedades nutricionales de su producto estrella: el aceite de oliva virgen extra (AOVE). Este fue el motivo de la ponencia en Expolevante que corrió a cargo del gerente de Castillo de Tabernas, Rafael Úbeda, y del directo científico de NutriSanum, el farmacéutico y nutricionista Antonio Murillo.

Salud y ciencia
El gerente de Castillo de Tabernas reconoció en sus productos “una gama de alimentos saludables que pueden mezclarse con la tradición y la gastronomía de cada cultura”. En esta definición encaja el concepto NutriSanum, un sello de calidad en el que trabaja la empresa para acreditar las bondades de este producto.

Antonio Murillo apuntaba a que “Andalucía tiene en marcha un proyecto de ley de promoción de la vida saludable y de alimentación equilibrada”, para lo que describe una serie de características que aportan valor al producto que, eso sí, deben de estar avaladas desde el punto de vista científico.

En este sentido, las investigaciones realizadas tanto con la Universidad de Almería y Citoliva demuestran el potencial antioxidante y vitamínico de este producto, con sustancias beneficiosas como polifenoles, hidroxitirosol, alfa-tocoferol, ácido oleico, escualenos o betacarotenos. Toda una carta de componentes curativos, antivíricos y antiinflamatorios que, de ponerse en valor en su correcta medida, deben redundar en una valorización económica añadida al ‘oro líquido’ del desierto almeriense de Tabernas.