La cooperativa CASI aprueba el cese de su gerente por ‘pérdida de confianza’

El Consejo Rector de La Cooperativa Agrícola San Isidro (CASI) aprobó en una reunión de urgencia celebrada en la tarde-noche del pasado miércoles el cese de Jesús Torres Galindo, gerente de la cooperativa.

Aunque no han trascendido los motivos de esta decisión, fuentes del propio Consejo han reconocido que responde a un problema de ‘pérdida de confianza’ de los responsables de la entidad hacia el gerente.

Decisión colegiada
La decisión de cesar al hasta ayer gerente de la cooperativa se adoptaba tras exponer la situación por parte del presidente y otros miembros del Consejo Rector y se hizo de forma colegiada por parte de los miembros del máximo órgano de dirección de la entidad agraria de La Cañada.

Las mismas fuentes han señalado que no hay razones ocultas en la aprobación del cese, sino más bien una serie de circunstancias y de  cuestiones que han generado un clima de desconfianza entre el Consejo y la Gerencia.

Continuidad
Lo que si parece claro es que no habrá más cambios en la estructura de la cooperativa almeriense y que tanto la Dirección Comercial como el resto de departamentos seguirán realizando las mismas labores y con las mismas personas al frente de las secciones.

Otras fuentes han señalado que uno de los problemas es la falta de comunicación del gerente con los socios de la CASI, que son al fin y al cabo los propietarios de la sociedad. Esa lejanía se ha hecho más palpable en la actual situación en la que los precios del tomate cotizan a la baja con una merma importante con respecto a los que se pagaron en la anterior campaña, casi el doble que ahora.

Salida ‘amistosa’
Desde el Consejo Rector se ha señalado que el cese del gerente ha sido ‘pacífico’, tratando de mantener una relación de entendimiento que ha sido buena en el año y medio en el que Jesús Torres se ha mantenido en el cargo.

Torres Galingo desembarcó en la cooperativa con sede en La Cañada en el mes de junio del año 2014, sustituyendo en ese puesto al macaelense Antonio González, que fue gerente desde  el año 2011 hasta mediados de 2014, cuando salió al ganar las elecciones Miguel Vergas frente al anterior presidente, José María Andújar.

El gerente recién cesado procedía de la sociedad hortofrutícola Ramafrut, donde fue gerente en el centro de esta empresa en Cervera (Lérida). Desde allí dio un fuerte impulso al negocio internacional de la compañía valenciana, con ramificaciones en Vícar, pero también en países como Panamá o Senegal.

Al fondo de la situación que ha derivado en la salida del gerente está el malestar detectado entre los socios y que está directamente relacionado con la pérdida de rentabilidad de los agricultores a causa de los bajos precios que se están registrando esta campaña.

Junta ‘caliente’
Socios de la CASI han relacionado la salida de Torres Galindo con la celebración de la junta general de socios de la cooperativa, prevista para dentro de unas pocas semanas. Allí el presidente y el Consejo Rector tendrán que dar cuenta de la situación de la sociedad y del mercado del tomate.

El actual Consejo tiene sus detractores que están preparando una asamblea que se prevé plena de dificultades a causa de esa crisis que está suponiendo un descenso de las rentas de los productores que se estima en torno a un cincuenta por ciento con respecto al año pasado.

Esa circunstancia, y las últimas inversiones realizadas, están en el centro de un debate que se trasladará a la asamblea de socios. Y mientras tanto los productores y los rectores de la CASI miran al cielo y albergan la esperanza de que la llegada del frío invernal les permita remontar una situación que es ya muy preocupante.