Cajamar renueva su cúpula con el reto de unir a todas las rurales

Eduardo Baamonde releva a Juan de la Cruz Cárdenas con el respaldo de un 97% del 1,3 millones de socios 

Eduardo Baamonde, nuevo presidente de Cajamar, se dirigió ayer en su primer discurso a la asamblea formada por más de 250 socios delegados La Envía
Eduardo Baamonde, nuevo presidente de Cajamar, se dirigió ayer en su primer discurso a la asamblea formada por más de 250 socios delegados La Envía
Manuel León
01:00 • 28 abr. 2016

Cajamar, que abrió su primera oficinilla hace ahora medio siglo, inicia un nuevo episodio de su historia con el reto de alcanzar el sueño de unir a todas las cajas rurales de España.




Un nuevo presidente, un técnico del cooperativismo agroalimentario, Eduardo Baamonde, resultó ayer elegido presidente del Consejo Rector, relevando a Juan de la Cruz Cárdenas con el respaldo del 97% de los 230 delegados  que votaron ayer en La Envía, en representación de 1,3 millones de socios que posee la primera cooperativa de crédito de España.




La entidad almeriense evidenció ayer, más que nunca, la necesidad de tocar a rebato, de unir las meriendas de todas las cajas rurales del país para poder jugar con desahogo en la primera división financiera europea. El gesto de Juan de la Cruz Cárdenas, de no acudir a la reelección, se interpreta como un movimiento de ficha para conseguir aunar a todas las piezas del sector, como ha ocurrido recientemente en Holanda y Alemania.




La Asamblea aprobó ayer las cuentas individuales de la entidad en 2015 con un resultado neto de46,8 millones, la mitad que el ejercicio anterior (97,9 millones), debido  a las operaciones extraordinarias no recurrentes de 2014.




Para 2016, el consejero delegado del Banco de Crédito Cooperativo, Manuel Yebra, entidad cabecera del Grupo Cajamar, explicó que la previsión es alcanzar los 50 millones de euros. La entidad almeriense cerró el pasado ejercicio con un balance de algo más de 37.000 millones de euros, lo que supone un crecimiento interanual del 7,3%. Esta evolución positiva se debe a la mayor actividad con entidades de crédito, al incremento de la participación accionarial en el BCC tras la ampliación de capital y por las distintas emisiones realizadas a lo largo del ejercicio.




Cajamar consiguió en 2015 rebajar su morosidad con el reto de volver a hacerlo durante el ejercicio en curso. Los activos dudosos se han reducido en 660 millones.




Yebra señaló que “nuestro objetivo es contribuir a reforzar la singularidad de las cajas rurales, dejando la puerta abierta al entendimiento con más entidades cooperativas, con la solidez que da la suma de esfuerzos”.
 





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