Cadenas que se fueron vuelven a comprar

Distribuidoras europeas acuden de nuevo a por hortalizas al campo almeriense ante la alta demanda europea

El género  de las alhóndigas está experimentado un aumento de cotización del 10%.
El género de las alhóndigas está experimentado un aumento de cotización del 10%.
Manuel León
01:00 • 19 ene. 2017

Los precios al alza en las alhóndigas almerienses siguen sorprendiendo gratamente al sector, pero con matices: las cotizaciones a tres y cuatro euros de hortalizas como el calabacín o la berenjena están localizadas en partidas muy pequeñas de unos 50.000 kilos, aunque el precio medio también se incrementa de media un 10%.




Las claves para este subidón de los productos en las subastas, además del frío gélido  que domina Europa, hay que buscarlas en las producciones más ajustadas, con una merma del 15% de las cosechas, aunque haya aumentado la superficie.




Según el gerente de la cooperativa Vicasol, José Manuel Fernández, “las razones hay que buscarlas en que se ha regulado mejor la producción que otras campañas  y que se ha plantado más tardío con un verano más caluroso, eso ha provocado menos cuaje y menos kilos”.




La escasez de productos como el calabacín y la berenjena está propiciando estos días que muchas cadenas que se habían alejado coyunturalmente del invernadero urcitano, estén volviendo a pedir producción a las empresas locales para abastecer a un mercado ávido.




Las plagas, tanto en el campo almeriense como en Marruecos también han contribuido a formar esa ‘tormenta perfecta’ de falta de producto e incremento de los pedidos. “Es como siempre la ley de la oferta y la demanda la que rige este negocio”, expresaba esta semana el dirigente de la cooperativa vicaria que cuenta con 900 agricultores asociados y que quiere aumentar sus instalaciones en futuras fechas. La conclusión por parte de gran parte de las comercializadoras es que es bueno que haya estas tensiones, que falte algo de producto para que se animen los precios, aunque sin llegar a problemas de desabastecimiento y de carencias para poder cumplir con los contratos firmados. La consejera de Agricultura, Carmen Ortiz, también ha subrayado “el buen arranque de campaña, aunque  tenemos que ser prudentes”.
A pesar de estos óptimos precios de la casi totalidad de  las hortalizas, sobre todo de calabacín y berenjena, seguido de tomate, pimiento, pepino y judía, aún queda mucha producción  por arrancar en las fincas y también ver cómo se planteará la campaña de primavera-verano, con el melón y la sandía, más irregular aquel en precio y más consolidada ésta en las últimas campañas.




Almería evidencia también un cierto viraje hacía la explotación de productos bío en algunas de la grandes comercializadoras, tras el tope alcanzando con los métodos de lucha biológica y producción integrada. La pasada campaña, sin embargo, fue la primera en una década en la que se detuvo ese crecimiento.
Un informe de AMB señala que se ha producido una ralentización de nuevas inversiones en el sector, con un mantenimiento por lo general de las estructuras.




Las alhóndigas están gestionando la posibilidad de poder acceder a las ayudas europeas para modernización de invernaderos, como es el caso de Agroponiente.
 





Temas relacionados

para ti

en destaque