Una cadena de payeses se abastece en El Alquián

José Ametller, el benjamín de una familia de payeses catalanes, decidió con 23 años dejar el empleo en una multinacional y volver -como sus padres y abuelos en un puesto del mercado de Villafranca del Penedès- a vender productos de la huerta.

Junto a su hermano Jordi maduraron la idea y decidieron volver a los orígenes. En 2000 abrieron su primer puesto en el mercado, seguida de varias tiendas de frutas y hortalizas hasta llegar a las 84 actuales, abastecida con la producción de sus propias fincas.

En 2005 decidieron ampliar su área de actuación y desembarcaron en Murcia, con la gestión de la finca de cítricos Valerosa y en 2009 llegaron a Almería sumando en total 300 hectáreas. Aquí mantienen desde entonces un acuerdo de explotación con el Grupo, Caparrós sobre 12 hectáreas que se ha ido ampliando en superficie y en variedades. Ambas firmas, Ametller y Caparrós, suman sinergias y experiencias que han ido consolidando en los últimos años.

Ametller valora de esta actividad en la provincia almeriense, en la zona de El Alquián, la cosecha que obtiene de jugoso tomate de invierno para abastecer sus establecimientos en Cataluña. “Una mejor insolación y un ph más alto del agua de riego garantizan un mejor sabor de estos tomates almerienses”, explican desde la compañía.

Pedro Caparrós, gerente del Grupo Caparrós, también valora este acuerdo con sus socios catalanes para fidelizar el suministro de sus cotizados productos directamente a tiendas especializadas. Casa Ametller expresa que toda su producción propia se realiza mediante métodos de producción integrada. José Ametller incide en que “el campo es el eje principal donde gira nuestro negocio, bajo la filosofía de integración vertical, sin intermediarios, directamente de la huerta”.

Su filosofía es recoger la lechuga del campo y al día siguiente venderla en la tienda, como lo hacían los antiguos payeses. En la actualidad, Case Ametller cuenta con un millar de empleados y una facturación que roza los 100 millones de euros, con unos crecimientos sostenidos del 30%. Una de sus últimas apuestas fue la inversión en una planta industrial  en Pénedes para hacer productos elaborados como gazpachos, cremas de verduras, ensaladas o tortillas.
En sus establecimientos, ahora, además de las frutas y verduras habituales, hay también lácteos, charcutería, carnicería y un apartado de comidas preparadas junto a pequeñas terrazas par almorzar.

Son uno de los pocos grupos en España que han conseguido hacer el círculo completo desde la propia producción a la restauración. Preparan también, en su nuevo espacio Cocina, zumos y ensaladas hechas en el momento.
También, la empresa de la familia Ametller ha empezado a vender a tercer productos elaborados por el yogur Yoligur, el primero realizado con aceite de oliva.  El año pasado Ametller consiguió el Premio de “Negocio del Año de la consultora RSM.