La actual temporada de melón y sandía no va a ser recordada por los agricultores almerienses por haber disfrutado de un festival de cotizaciones. Todo lo contrario: el campo provincial anda tan revuelto como unos huevos por unos precios de primavera que no están cubriendo costes de producción, según las organizaciones agrarias.
Para que se den estas bajas cotizaciones, con muchos kilos enviados sin precio, a resultas -en las alhóndigas apenas se está subastando melón y sandía- se ha necesitado que se forme la tormenta perfecta, tan temida por los productores de invernadero como el mismo granizo: bajas temperaturas en Europa, control de la producción de cantalup y galia por manos francesas y entrada a discreción de producto de Marruecos y Costa Rica.
El invernadero almeriense espera que los grados suban los próximos días y los supermercados europeos activen las compras de sandía y melón. El mercado nacional ha sido el principal receptor de estos productos hasta ahora. Con precios en origen a 20 céntimos el kilo, las organizaciones Coag, Asaja y UPA, recuerdan que no se cubren costes de producción -hay que llegar al menos a 0,50 el kilo-.
Demanda nacional Sin embargo, la demanda nacional está a buen nivel, sobre todo por el efecto sorpresa que supone el mes de mayo cuando se empiezan a encontrar en los lineales de los supermercados las primeras sandías y melones. Los precios, sin embargo, para el consumidor están por todo lo alto: a 13 euros se está pagando una pieza de 5 kilos de sandía negra y 17 euros por un melón piel de sapo de calidad.
Todo apunta a que, en esta ocasión, la fuerza de los hechos ratifica la queja de los productores: las cadenas se están forrando con la fruta almeriense de temporada, con subidas de precio de varios cientos por cien.
En este tablero de operaciones hortofrutícolas, la Comisión Europea acaba de publicar en su Diario Oficial que el próximo jueves 1 de junio entrará en vigor el reglamento de indemnizaciones por retiradas de producción. Como elemento a tener en cuenta, el melón se pagará por Bruselas a 48 céntimos el kilo, el doble que en el mercado, siempre que se done a una institución benéfica. Es decir que a los agricultores almerienses les interesará más arrancar la mata y regalar el producto que seguir vendiendo a precios por debajo de costes. En el caso de la sandía, el precio pagado por Europa será más bajo: 9,7 euros por kilo retirado.
Las organizaciones agrarias ya han instado a las organizaciones de productores a que activen los mecanismos de gestión de crisis y retiren producto. Con una producción anual de 3.000 millones de kilos de frutas y hortalizas, el campo almeriense se puede permitir retirar cuatro o cinco millones de kilos para regular la oferta y no seguir vendiendo por debajo de costes de producción.
Consulte el artículo online actualizado en nuestra página web:
https://www.lavozdealmeria.com/noticia/20/economia/130028/los-agricultores-empezaran-a-regalar-melon-a-los-pobres-antes-que-venderlo