A medida que se acerca el verano la situación de sequía se agrava. La primavera no ha sido precisamente lluviosa y las precipitaciones recogidas durante el pasado invierno han servido para mantener la situación hasta ahora, pero no garantizan los riegos durante los meses más calurosos del año.
Una situación que ha empezado a hacer reaccionar a las administraciones, tanto la española como la europea, en busca de soluciones que permitan mantener los regadíos y por tanto los sistemas de producción de alimentos, comprometidos en el sureste español.
Unión Europea
El Parlamento Europeo votaba ayer a favor de que varios países de la Unión refuercen sus vínculos con los países de la cuenca del Mediterráneo para desarrollar proyectos innovadores englobados en la iniciativa PRIMA, que permiten mejorar los sistemas agroalimentarios y el suministro y la gestión del agua en el área mediterránea.
Desde Bruselas se considera que este es un programa de gran trascendencia no sólo por su interés científico o tecnológico, sino porque “puede convertirse en un instrumento esencial para solucionar dos de los problemas que tiene la cuenca mediterránea como son la escasez de agua y la producción de alimentos”.
Decreto-Ley
Mientras tanto en España el Ministerio de Agricultura y Pesca, Alimentación y Medio Ambiente ha aprobado un decreto-ley que establece medidas de apoyo a las explotaciones agrarias afectadas este año por la sequía en varias demarcaciones, entre ellas las que corresponden a las cuencas del Segura y del Júcar.
Ese decreto establece, entre otras cuestiones, una serie de exenciones en los cánones de regulación de los riegos y en la cuota de tarifa del agua y afecta a un amplia área del sureste, en la que se incluyen los abastecimientos de la provincia de Almería que reciben agua de esas cuencas.
Otra de las medidas aprobada es que las empresas y autónomos con explotaciones agrarias afectadas por la sequía obtendrán una moratoria de un año sin interés en el pago de las cotizaciones a la Seguridad Social entre julio de 2017 y febrero de 2018, moratoria que llegará también al pago de las cuotas por las jornadas reales en el campo.
Ahorro de costes
Según los cálculos del Ministerio, esas exenciones de pago de cánones y tarifas supondrán a los regantes de las cuencas afectadas un ahorro de casi 54 millones de euros, si bien gran parte de esa reducción corresponderá a provincias como Murcia o Alicante y, en menor grado a Almería.
En la provincia almeriense las exenciones llegan debido a la situación y a la utilización de recursos de agua no habituales como pozos de sequía, contratos de cesión temporal de derechos o incremento de recursos no convencionales “necesarios para el abastecimiento de sus poblaciones”.
Para UPA unas medidas que se quedan cortas y que, en gran medida, “son ayudas que salen de los bolsillos de los agricultores, sino más bien aplazamiento del pago”.
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