Los regantes del Bajo Andarax ultiman el sistema para recibir agua depurada

La Comunidad General de Usuarios del Agua Depurada de Almería (CGUAL) ha iniciado las pruebas definitivas del sistema de microfiltrado con el que pretenden asegurar la calidad de las aguas depuradas de la capital para el uso agrario.

Las obras de instalación del nuevo sistema ya han concluido y esta misma mañana llegarán los técnicos encargados de realizar las pruebas que han de servir para certificar la idoneidad del tratamiento de las aguas que proceden de la planta depuradora de El Bobar.

Cerrar el sistema
El sistema de microfiltrado fue encargado y contratado el pasado mes de septiembre, después de que la Junta de Andalucía decidiera dejar en suspenso la concesión de las aguas depuradas de la capital hasta comprobar que el tratamiento terciario cumplía con las exigencias.

Fueron precisamente las dudas en torno a la eficacia del tratamiento terciario las que llevaron a la Consejería de Medio Ambiente a interrumpir el abastecimiento de agua a esta comunidad de usuarios del agua, que llevaba más de veinte años gestionando las aguas procedentes de la depuradora.

Obras urgentes
La contratación de las obras para la instalación de un nuevo terciario por parte de la comunidad de regantes del Bajo Andarax se realizó por el procedimiento de urgencia a la vista de que, tras la suspensión, dejaron de percibir los casi 15 hectómetros cúbicos que aseguraban los riegos en alrededor de 3.000 hectáreas de cultivos en esta zona.

El presidente de CGUAL, José Antonio Pérez, aseguraba ayer que tras la construcción del sistema de microfiltrado, la instalación de los motores y las bombas de impulsión y el sistema de software destinado al control del proceso para el tratamiento de las aguas, “En la tarde de este martes se realizarán finalmente  las pruebas de funcionamiento para determinar la eficiencia de todo el sistema de tratamiento”.

Autorización  
Para realizar este tipo de pruebas la Comunidad General de Usuarios ha solicitado a la Consejería de Medio Ambiente el suministro de agua procedente de la planta depuradora de El Bobar “para realizar las pruebas definitivas con el agua que, una vez resuelta la nueva concesión, se va a utilizar en los regadíos de esta zona”.

Para el presidente de la comunidad, este es un paso previo importante para la obtención de una nueva concesión de uso de las aguas previamente depuradas de la ciudad de Almería y de varios de los pueblos del Bajo Andarax, ahora conectados con la planta de El Bobar.

Comprobaciones  
El ensayo está encaminado a comprobar la idoneidad del sistema de microfiltrado instalado en los sistemas de riego de la comunidad de regantes. Para constatar esa eficacia se harán muestreos del agua que saldrá de ese último tratamiento terciario, muestras que deben servir para certificar la calidad del tratamiento y del agua obtenida.

Pérez afirma que no se esperan sorpresas “porque el terciario que se ha instalado no es nuevo, sino que se está utilizando en otros muchos lugares de España y de otros países con resultados satisfactorios, así que el caso de las aguas de Almería no debería ser una excepción”.
 
Recuperar el agua  
De no mediar inconvenientes o no ser necesarios ajustes técnicos, la CGUAL dispondrá de un sistema de tratamiento terciario que harán posible la utilización de las aguas residuales de la capital y del Bajo Andarax para todo tipo de regadíos en una amplia zona cultivada por más de 2.000 agricultores almerienses.

Una vez creado y testado el nuevo sistema de tratamiento, la Comunidad General de Usuarios espera que se resuelva “lo antes posible” el expediente de concesión de uso de esas aguas, ya que la CGUAL es la única entidad que ha solicitado las aguas residuales depuradas de Almería para su uso en los regadíos del Bajo Andarax.

Regadíos
Cuando la Consejería de Medio Ambiente de la Junta de el visto bueno a esa concesión, los regantes recuperarán un volumen de recursos que estará entre los 13 y los 15 hectómetros cúbicos de agua, unos recursos que ya se han estado utilizando en los últimos veinte años y que se consideran imprescindibles para poder hacer frente a las necesidades de agua de una amplia comarca que abarca no sólo la Vega de Almería, sino la de otros municipios del Andarax como los de Benahadux, Pechina, Rioja, Viator o Huércal.