40 millones de kilos de plásticos tirados en el campo

Veinte millones de residuos plásticos se acumulan en el campo almeriense y otros veinte más se sumarán al finalizar la campaña, si nadie lo remedia. 

Resulta que Almería ha llegado a concebir el mayor cluster agroindustrial del sur de Europa -tecnología punta, investigación genética, control biológico, cultivos hidropónicos, riego gota a gota- pero ha sido incapaz de solucionar el pegajoso problema de qué hacer con los plásticos de invernadero que sirve para que germinen de forma extratemprana hortalizas de primor y que se desechan cuando acaba cada temporada.

Desde hace cinco años, Cicloagro, la alianza formada por los fabricantes de plásticos y proveedores como TPM, Sotrafa, Cepsa o Repsol, tiene la concesión de la Consejería de Medio Ambiente de la recogida y reciclaje de estos residuos que afean el entorno. Dos son las empresas -Hermanos Mancha e Ibacplast- ambas en el Ejido, a las que Cicloagro tiene encomendada la tarea de ser centros homologados de acopio y recogida. Sin embargo, la encomienda no ha funcionado y la concesión ha vencido y la recogida de restos flota actualmente en el limbo.

 Las dos compañías subcontratadas se han venido quejando de que el plástico bueno, el de cubierta, los agricultores lo llevan a venderlo a  otras  plantas distribuidas por la provincia, y el menor valor, que produce una tonelada cada dos hectáreas, les genera pérdidas su recogida ya que se paga a menos de siete euros la tonelada. Los fabricantes concesionarios también han justificado el escaso funcionamiento de Cicloagro por el hecho de que a Almería llega mucho plástico de importación, en torno al 30% que se utiliza en los invernaderos, procedente de Israel, Portugal oTurquía, quienes no se involucran en estos planes de recogida.

Para evitar que haya que volver a las quemas y formación de humaredas de antaño, en la actualidad prohibidas, siete empresarios de Residuos Agrícolas -seis de Almería y uno de Murcia- han constituido la Asociación de Gestores de Residuos Agrícolas, con la mediación de la organización Coag.

A través de su presidente Enrique Valle han anunciado que en breve pondrán en marcha dos centros de recepción y almacenaje de residuos agrícolas para salvar la campaña. De unos 15.000 metros de superficie, uno estará ubicado en Níjar y otro en El Ejido.

La idea de este colectivo es almacenar el producto recogido y prensado en fardos y abordar a medio plazo la construcción de una fábrica de gestión y tratamiento de residuos agrícolas para la agricultura intensiva provincial y podría estar en Níjar.

Hace unas fechas, la Asociación de Gestores y Coag se reunieron en Sevilla con la secretaria general de la Consejería de Medio Ambiente, Pilar  Navarro, quien les trasladó el compromiso de convocar otro encuentro en Almería con los fabricantes de Cicloagro y con los importadores de plástico para alcanzar un acuerdo ventajoso para todas las partes.