El PITA ha multiplicado por 40 su facturación en poco más de 5 años

El Parque Científico-Tecnológico de Almería ha alcanzado una velocidad de crucero que le ha permitido incrementar sus resultados en el último año hasta alcanzar su nivel más alto de ocupación desde que se inaugurara en el año 2013.

La evolución de las cifras indica que se ha pasado de los 9 millones que facturaban las empresas instaladas en la tecnópolis almeriense en 2013 a los 374 que sumó la facturación en 2017, un año que se cerró con 85 empresas registradas.

En este tiempo el empleo en el PITA se ha multiplicado por diez, pasando de los 184 trabajadores de su primer año de funcionamiento a los 1.825 que desarrollaban allí su actividad al cierre del ejercicio de 2017.

Ampliación
La demanda de espacios por parte de las empresas no ha dejado de crecer, hasta el punto de que la ocupación de los espacios con oficinas en alquiler subió hasta el 90 por ciento en el edificio Pitágoras, y hasta el 97 por ciento en la sede científica instalada en la Universidad de Almería. Al cierre de 2016 esos porcentajes eran del 80 y el 66 por ciento, respectivamente.

Ese nivel de ocupación ha hecho que la dirección del parque se ponga en marcha para construir un nuevo edificio, que se ubicará al norte del actual Pitágoras y del de la Fundación Tecnova, para atender la demanda de alojamiento empresarial.

Negocios
La presidenta del PITA, Gracia Fernández, señaló durante la presentación de los datos del parque que la demanda por parte de las empresas está creciendo en los últimos años. Actualmente hay acuerdos prácticamente cerrados con una decena de empresas y contactos con al menos medio centenar de sociedades, nacionales e internacionales, interesadas en instalarse en el tecnoparque de El Alquián.

Las perspectivas para este año son “muy positivas” a decir de los responsables del PITA, que están centrando sus esfuerzos en el mercado local, pero que al mismo tiempo disponen de demandas procedentes de firmas nacionales e internacionales.

Sectores como los de la agrotecnología, la biotecnología o los servicios vinculados con la agricultura son los mayoritarios en el tecnoparque almeriense, que aspira a ser referente también en otros segmentos de actividad, asociados con el concepto de la sostenibilidad como las tecnologías del agua o la de las energías renovables.

El parque dispone de alrededor de un millón de metros cuadrados de superficie en la que espera un desarrollo importante en los próximos años. Se trata de parcelas con una superficie media de mil metros cuadrados que se están vendiendo por un precio medio de 120 euros/metro.

Diariamente pasan por el PITA más de 2.000 personas lo que lleva a la dirección a plantear nuevas zonas de aparcamiento, a negociar una mejora del transporte público y a proyectar nuevos accesos directos desde la Autovía del Mediterráneo.

Locomotoras
El sector agroalimentario y sociedades con fuertes vínculos conforman la columna vertebral del Parque Científico-Tecnológico de Almería, una presencia que tiende a aumentar en los últimos meses y de cara al futuro.

El proyecto más importante a día de hoy es la construcción de una ‘ciudad financiera’ por parte de Cajamar, que dispone de una reserva de suelo de 40.000 metros cuadrados que podría ser ampliada con nuevas superficies destinadas a albergar sus servicios.

Otras empresas como Única Group, Biorizón o la Fundación Tecnova suponen parte importante de los espacios y de la actividad en el tecnoparque almeriense, desde cuya dirección se apuesta por reforzar esa vocación agroalimentaria, y abrir nuevas vías en energías renovables o tecnologías del agua, “con la innovación, la calidad y la tecnología como elementos irrenunciables”.