Habrá decreto para obligar a los bancos a pagar el impuesto de las hipotecas

La sentencia emitida por el Tribunal Supremo exonerando a los bancos  del pago del impuesto de las hipotecas ha provocado un enorme revuelo en la vida política y financiera del país. Pero más allá de eso, ha generado un clima de indignación en los más de 450.000 españoles que tienen créditos hipotecarios y que hace unos días albergaron esperanzas de recuperar el dinero del impuesto, esperanza arruinada tras el cambio de signo en la sentencia del Supremo.

Al quite el presidente del Gobierno, Pedro Sánchez, que ayer mismo anunciaba la aprobación inmediata de un real decreto de reforma del impuesto de Transmisiones Patrimoniales y Actos Jurídicos Documentados para que finalmente sean los bancos quienes paguen ese impuesto.

Tormenta
Desde que se diera a conocer la sentencia han llovido las críticas hacia el Alto Tribunal y sus responsables. Desde la mayor parte de las organizaciones políticas, sindicales o sociales  se considera incomprensible que el Supremo corrija una sentencia emitida por una de sus salas, precisamente la especializada en este tipo de asuntos.

Contundente la postura de la Asociación de Juezas y Jueces para la Democracia, que califica de “insólito” el fallo, por contravenir varios artículos de la Ley Orgánica del Poder Judicial. Considera responsables al juez Luis María Díez-Picazo y al presidente del Tribunal Supremo, Carlos Lesmes, por la “nefasta gestión” de este caso y afirma que semejante actuación “no sólo merece una disculpa, sino que avoca a la dimisión inmediata de ambos”.

El decreto que anuncia el Gobierno hará efectivamente responsables a los bancos del pago del impuesto, pero que no tendrá carácter retroactivo y por tanto no permite la devolución a los clientes.

Un clamor
En cualquier caso ayer proliferaron las declaraciones, la mayoría de ellas reflejando estupefacción por el cambio de criterio del Supremo. Desde el propio Gobierno se señalaba que aún respetando la labor e independencia del Poder Judicial, lamenta una sentencia “que no es positiva ni para las entidades financieras, ni para los jueces ni para los ciudadanos”. El presidente Sánchez avanzó la aprobación  del decreto y asegura que “nunca más los ciudadanos pagarán el impuesto de las hipotecas”.

El líder del Partido Popular pedía también ayer al Ejecutivo de Sánchez la supresión del impuesto “porque es posible”. Desconfía en cualquier caso de la gestión de ese impuesto, apuntando a las prácticas bancarias: “sabemos que se dice que ese impuesto lo paga la banca, la banca lo va a repercutir en el coste de suscribir una hipoteca”.

Quien no acepta la actual situación, ni la reforma propuesta por el Gobierno, es el secretario general de Podemos, Pablo Iglesias, al que las medidas anunciadas por Pedro Sánchez no le parecen suficientes porque “no se pueden limitar a que se apliquen a partir de ahora”. A su juicio, “los bancos tienen que devolver el dinero de ese impuesto a los usuarios que ya lo habían pagado”.

Investigación
Más allá ha ido el secretario de Relación con la Sociedad Civil de la formación morada, Rafael Mayoral, que arroja dudas en torno a la postura de los jueces y se pregunta si los jueces “se han enriquecido con esta sentencia”. Pide que se investigue si esto ha sido asó por la subida de las acciones de las entidades.

Albert Rivera, presidente de Ciudadanos, denunciaba que el caso de las hipotecas se haya convertido en un “espectáculo” que ha provocado una auténtica conmoción social por cómo ha acabado y cómo se ha desarrollado”. Afirma además que la Justicia “se ha pegado un tiro en el pie” y ha aprovechado para pedir el apoyo del resto de los partidos para la reforma que propone Ciudadanos en el nombramiento del Consejo General del Poder Judicial para que los jueces sean más libres.