En auge las tiendas de barrio con productos de la tierra

Las nuevas tendencias que se abren paso entre los consumidores europeos, y entre ellos los almerienses, apuntan a un cambio de tendencia; se busca cada vez más lo que se denomina el comercio de proximidad y también el producto de la tierra.

Al amparo de esa tendencia, que tiene que ver con la sostenibilidad de los territorios, con el apoyo a los productores locales y al menor impacto sobre el cambio climático de los alimentos que se cultivan cerca del consumidor final, en Almería están proliferando este tipo de comercios, lo que siempre se ha denominado ‘tiendas de barrio’.

Lo local, en auge
En la práctica totalidad de los barrios de Almería se han ido abriendo este tipo de establecimientos que luchan con el arma de la cercanía al comprador, pero también con el atractivo de los productos con denominación de origen Almería.

En sus estanterías desde frutas y hortalizas de Almería, La Cañada o El Alquián, hasta naranjas y mandarinas de Gádor o de Antas o dulces caseros, patatas fritas o pan de masa madre llegados desde Olula del Río, Taberno, Uleila o Alboloduy, entre otros muchos orígenes de la provincia.

Más tiendas
Como ejemplos la Tiendecilla de la Toñi, en la Avenida de Pablo Iglesias, la Frutería en la calle Calzada de Castro, las situadas en la Calle de Las Tiendas e incluso un popular supermercado regentado por una familia china en la calle Artés de Arcos que ha elegido como fórmula para llegar a los consumidores de la capital disponer de una amplia variedad de productos ‘made in Almería’.

Los problemas para encontrar empleos estables ha hecho que muchos de los que han optado por la fórmula de las tiendas de barrio sean autónomos que en un porcentaje nada despreciable proceden del propio sector del pequeño o mediano comercio y que han encontrado un buen nicho de mercado en el que compiten no sólo con la calidad de las producciones almerienses, sino con una política de precios ajustados a los costes que son bien recibidos por los clientes. Y, por supuesto, juegan la baza del trato personal para ganarse su confianza.