Los almerienses deben a los bancos 15.393 millones y les subirá el euribor

La larga racha bajista del euribor -el índice de referencia de los tipos de interés de más del 90% de los créditos en la provincia-parece haber llegado a su fin y dañará a corto plazo el bolsillo de los almerienses. 

Las declaraciones la pasada semana de la presidenta del Banco Central europeo, Christine Lagarde,  han acelerado, a tenor de los últimos movimiento, el final de los tipos bajos para contener la inflación que alcanza el 5% en Almería a tono con la zona euro. De hecho, en los últimos días, desde la comparecencia de Lagarde, la referencia del euribor a 12 meses ha escalado del -0,45% al 0,3%, aplacando los estímulos compradores.

La tasa media de febrero  marca el -0,37%, muy lejos del 0,5% de hace un año.

La masa de créditos al sector privado en la provincia de Almería suman 15.393 millones de euros, el 10% menos que hace un año, según el Boletín del Banco de España. Durante 2021 se formalizaron cerca de 8.000 hipotecas constituidas sobre viviendas, el 28% más que en 2020 que estuvo frenado por el periodo de confinamiento. El importe de estos préstamos hipotecario ascendió a 527 millones de euros, el 30% más que el año anterior.

Los clientes almerienses de los bancos que optaron por una hipoteca a tipo fijo, que son una minoría, serán los que, por comparativa con los de interés variable, más salgan beneficiados, aunque paguen el mismo tipo a  lo largo de toda la vida del crédito o préstamo.

En Almería, desde la época del pinchazo de la burbuja inmobiliaria hace más de una década, los tipos de interés referenciados al euribor han ido tendiendo a la baja para reactivar el mercado. Ahora, parece que se está ante un nuevo punto de inflexión por la espiral de crecimiento de la inflación.

No obstante, la vivienda sigue siendo el principal valor refugio de los inversores de la provincia, alentado por la demanda extranjera en las zonas de costa. La provincia, no obstante, tiene un amplio stock de vivienda sin vender en manos de los bancos por créditos y préstamos hipotecarios fallidos. Muchas de ellas están siendo comercializadas a través de los portales inmobiliarios adscritos a la Sareb o Banco Malo, que debe vender todo ese ladrillo antes de 2027.

En términos porcentuales, Castellón, junto a Almería, eran hasta 2020, las dos provincias, con más stock de vivienda vacía derivada de la crisis de 2008.