Agua de Torrevieja a precio de oro para poder sembrar melones y sandías

Regantes del Levante almeriense han hecho ya reserva de agua de la Desaladora de Torrevieja ante los negros presagios que se ciernen para poder sembrar en primavera. Se trata de las comunidades de Pulpí, Antas, Vera y Cuevas del Almanzora que firmarán en breve un convenio con Acuamed  para empezar a recibir caudal a finales de febrero. 

No es exactamente agua desalada la que recibirán los regantes levantinos, sino agua del Trasvase Tajo Segura que se permuta cediendo sus derechos en la desaladora de Torrevieja a los regantes de Alicante y del Campo de Cartagena.

Para los regantes almerienses, que pagarán este agua a sesenta céntimos a pie de bancal, esta permuta supone un beneficio, puesto que el agua de la desaladora es necesario mezclarla para neutralizar el boro. 

La desaladora de Torrevieja es la mayor de Europa con una producción de más de 40 hectómetros con proyecto de ampliación hasta 100 metros cúbicos.  También se está realizando un canal desde la desaladora hasta el Trasvase que encarecerá aún más el agua producida. El precio es el caballo de batalla de este agua que lleva llegando desde hace tres años, a razón de 15 hectómetros anuales, como complemento al Levante y el Almanzora ante la bajada de nivel del Negratín que hace que se haya cortado el Trasvase durante los últimos años.

La situación se puede agravar aún más para la siembra almeriense si sigue sin llover y se cierra también el Trasvase del Tajo Segura en abril. La amenaza está latente.

La Junta Central de Usuarios ‘Valle del Almanzora’, que agrupa a 25 comunidades y 32.000 hectáreas de regadío, viene manteniendo negociaciones con el Ministerio de Transición ecológica para que Acuamed garantice el precio de 0,48 céntimos a las comunidades (0,60 a los regantes) no solo  hasta el año 2025 como se ha comprometido el Gobierno, sino de forma permanente. 

El Estado ha consignado hasta 2025 en torno a 90 millones de euros para subvencionar agua desalada en todo el arco mediterráneo desde los 1,30 de precio real actual con la subida de la factura eléctrica a más de 200 euros el megavatio.

La idea del Ministerio es sustituir 100 hectómetros del Tajo Segura por agua desalada. En el pantano del Almanzora apenas queda el 8% de reservas, que son unos siete hectómetros.

Las expectativas para la cosecha de primavera de melón y sandía en el Levante almeriense son ahora muy  crudas, según los regantes. Ya no queda apenas agua en el pantano, el Trasvase del Negratín está cerrado, Níjar tiene preferencia en el abastecimiento de la desaladora de Carboneras, la desaladora de Cuevas sigue averiada y la única esperanza es Torrevieja. Pero con los precios del agua desalada, los números no salen. Sobre todo si el kilo de melón y sandía sigue tan bajo como el año pasado a menos de 30 céntimos y al mismo tiempo el agua desalada sigue subiendo.