Ningún otro recinto de Almería tiene tanta solera para hablar de trenes como el Teatro Cervantes: desde hace más de un siglo se vienen celebrando actos reivindicativos en demanda de todo tipo de ferrocarriles, desde la época de Ivo Bosch, desde aquella campaña de ‘Almería sin salidas’ hasta el día que Diego Martínez Cano pronunció frente al mismo patio de butacas aquello de ‘Bienvenidos a la isla de Almería’. Por eso, ayer, ante una concurrencia de medio centenar de empresarios, en ese mismo coliseo, se anunciaba la intervención de Iñigo de la Serna, un exministro de Transportes que tuvo mando en plaza dos años en el ferrocarril almeriense.
Aunque el encuentro Diálogos para el Desarrollo, organizado por la Fundación Almeriense para Excelencia Empresarial (FAEEM), venía rotulado bajo el título de ‘El reto de crecer’, en realidad lo que se estaba esperando en las tablas del escenario era, no tanto oír hablar de PIB y de déficit público, como del presente y futuro de nuevo AVE. Y De la Serna se mostró rotundo: “Por mi experiencia de ingeniero veo imposible que el tramo de Almería a Murcia esté finalizado en 2026”. Y recordó que “en mi etapa de ministro -2016 a 2018- yo dije que el AVE podría estar concluido en 2023, pero no sé que ha podido pasar después para que no se hayan cumplido los hitos, lo mismo con la parte de El Puche y la histórica Estación que debería haber pasado al Ayuntamiento para algún uso cultural, claramente ha habido una paralización, aunque es verdad que en los últimos meses ha habido una aceleración”.
Añadió de la Serna que “cuando yo llegué al ministerio de Transportes y vimos el tramo Almería-Murcia tuvimos que rehacer los proyectos y adaptarlos a la realidad y lo hicimos de una tacada, quisimos hacer todas las cosas de forma transparente”.
El exministro y exalcalde de Santander, ahora trabajando para la empresa privada, reconoció que “cuando en conferencias alguien se me queja de la situación de falta de inversión en una región, yo siempre pongo a Almería como el verdadero ejemplo de déficit de infraestructuras”. A pesar de todo, indicó de la Serna, “lo que hace Cosentino en una provincia como esta es sensacional, una Almería que crece por encima del 3% y exporta por valor de 4.000 millones, a pesar de su aislamiento”.
También habló De la Serna del reto del agua en una provincia como Almería, de la necesidad de ejecutar los planes hidrológicos que se redactan. “Deberíamos de tender más a un sistema de concesiones, de colaboración público-privada con financiación europea”.
El otro ponente de la jornada, el economista David Cano, de Analistas Financieros Internacionales, apuntó a la necesidad de replantearse la globalización y apostar por la reindustrialización en Almería “una provincia donde hay empresas como Cosentino que son capaces de transformarlo todo mediante la inversión, porque en España hay aún mucho miedo a la inversión con un billón de euros en depósitos bancarios”.
Y añadió que “Almería es un referente internacional en el sector primario y en lo que se denomina Agritec, fuera se habla mucho de Almería y muy bien, a pesar de los déficits en comunicaciones y tiene una entidad financiera, Cajamar, surgida en su propio territorio y que es una gran ventaja competitiva porque es más sensible con sus sectores”.
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