“Tienes que empezar a creértelo desde el principio. Los dos primeros años no hubo demasiados cambios, pero ahora tenemos 150 hectáreas más en Cabasc que pertenecen a la cooperativa”. La voz de la experiencia la pone Manuel Fuentes, miembro de Cabasc, en una conversación que surge en torno a los primeros años de la cooperativa de segundo grado. Andrea Álvarez, la más joven, reconoce que su trabajo como comercial “crea adicción”. Ella venía de otro sector, así que tuvo que aprender, primero como asistente de comercial y luego, asumiendo la responsabilidad en primera persona. Así lleva ya año y medio, manteniendo una estrecha proximidad con los agricultores, con el mercado, con las cooperativas...Y con los compañeros “de los que he aprendido mucho. Son expertos en cada uno de sus trabajos. Cuando yo pienso algo, ellos ya lo han pensado antes”, confiesa Andrea, mientras sus compañeros sonríen. La joven profesional subraya también los valores. Valores que hacen que un trabajo difícil resulte estimulante, “porque de cada problema surge siempre una solución, cuando no una ventaja”. Quizás tenga que ver en esa apreciación la existencia de nuevos proyectos y la alta implicación de los directivos. Dos cosas que “le faltan a muchas empresas”.
Loli Rodríguez se siente aludida por los comentarios de Andrea que comparte su día a día en el trabajo. Después de más de veinte años en Cabasc se implicó en el proyecto de Unica que “parecía casi imposible al principio, pero contamos con un equipo técnico que tiene todo muy bien planificado”. Loli encuentra una relación directa entre ese aspecto y el creciente número de agricultores que solicitan integrarse en Unica Group a través de la cooperativas que la forman. “El grado de especialización que hemos alcanzado en cada producto y en cada cooperativa también abarca al agricultor, que está alcanzando un alto nivel como cultivador especializado”, explica Loli.
Joven y veterana al mismo tiempo, Loli destaca también la valiosa aportación que representa la red informática desarrollada dentro de la propia organización y que permite integrar en tiempo real la gestión en todos los sentidos como si las distintas cooperativas estuviesen juntas en un mismo espacio.
Hablando de jóvenes y veteranos, Carlos García Sánchez, que es agricultor de Cohorsan, no quiere dejar pasar la ocasión para recordar que algunos agricultores de nueva incorporación “han echado tantas raíces o más que los antiguos”. La cosa no queda ahí. Carlos valora también el hecho de que “antes se incorporaban al principio como colaboradores, pero ahora solicitan ser socios desde el primer momento”. La razón está clara, para Carlos: “el factor decisivo es el económico. El resultado al final de año”.
David Murcia, responsable de Desarrollo de Negocio, añade un enfoque de futuro: “ Unica está favoreciendo un cambio de mentalidad en el agricultor. Ahora se plantea las cosas a medio y largo plazo. Sabe que tiene que producir con la máxima calidad y la cantidad adecuada”.
Manuel Fuentes recoge el testigo y recuerda como esa inquietud estaba, de alguna manera, en el origen del cooperativismo almeriense. De eso sabe bastante este agricultor que vivió ya su infancia muy cerca de Cabasc, ya que la presidencia era ejercida por su padre.
Loli reconoce que los cooperativistas tenían ya experiencia en esto de asociarse, pero el proyecto de Unica exigía “engrasar el mecanismo”. La experta comerc
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