El valor de las ventas de aceite almeriense sube el 157% en un año

Sin disponer de las mastodónticas cosechas de provincias como las de Jaén o Córdoba, ni disponer de un número de hectáreas comparable con ellas, el aceite de oliva almeriense se está abriendo un hueco importante en el mercado internacional del aceite de oliva, un hueco basado en una firme apuesta por la calidad.
Ese nicho de mercado ha permitido que en el último año, en concreto entre los meses de enero y octubre del pasado año 2013, el valor de las exportaciones almerienses de este producto se hayan incrementado en un 157,5 por ciento con respecto a las cifras del año 2012.
De las almazaras almerienses salieron en esos diez primeros meses de 2013 1,3 millones de kilos de aceite de oliva con destino a los mercados internacionales, un volumen que supone un 84 por ciento más que un año antes.

El delegado territorial de Agricultura, Pesca y Medio Ambiente, José Manuel Ortiz Bono, indica que el hecho de que el incremento del valor de las ventas supere en casi el doble al del volumen (un 157,5% frente al 84%) supone un reconocimiento de la calidad del aceite que se produce en Almería.
Los italianos con nuestros principales clientes ya que en este último año se han llevado el 73 por ciento del total de las exportaciones realizadas por las empresas de la provincia. Tras los italianos se sitúan los compradores de Suiza, con un 9 por ciento, de Alemania con un 2,9 por ciento y de Andorra con un dos por ciento.

La cuestión es que además de los clientes ‘clásicos’, las almazaras de la provincia se están abriendo camino hacia otros destinos interesantes para su producto. En estos últimos años la lista de países-cliente ha engordado con mercados tan lejanos como Japón, Brasil o Senegal, con otros de gran potencial como los de Croacia o Portugal, o con la presencia cada vez mayor en Estados Unidos, donde crece cada año la compra de aceite de oliva virgen extra procedente de Almería.
La apuesta por la calidad es patente y se complementa con una producción ecológica que gana peso y que avanza un paso más en el prestigio del aceite almeriense.