Key Mare entra en concurso con una deuda de más de 100 millones de euros

Key Mare, uno de los gigantes del ladrillo en la provincia, ha entrado en concurso de acreedores, según auto del juzgado de lo Mercantil de Almería.
Cae así, aunque aún tiene margen para negociar una quita con decenas de acreedores, uno de los paradigmas del desarrollo residencial del Levante almeriense, con sede en Vera, que llegó a atesorar más mas de cuatro millones de metros cuadrados y construyó cerca de 3.000 viviendas.
Se trataba de una salida barruntada ya en septiembre de 2013, cuando la promotora inmobiliaria presidida por Gabriel Sánchez, se acogió al preconcurso como paso previo a una suspensión de pagos que no ha podido evitar.
También ha entrado en concurso por procedimiento voluntario ordinario su filial Key Mur.
El director general de Key Mare Inversiones y Promociones, Pedro Mur, explicaba hace unos meses que se intentaba contar con el beneplácito de los tres principales bancos acreedores -Banco Popular, Sareb (banco malo) y Mare Nostrum (antigua Caja Murcia)  sobre el plan de viabilidad presentado. Se trataba de una propuesta a tres años que no ha sido aceptada por ahora.

Millones de metros Han sido designado administradores concursales del proceso Diego Eusebio Navarro López como letrado del acreedor comercial Construcciones Gámez Ramos, en la actualidad Solyder Construcciones Generales. También, Carlos Alvarez Fernández en calidad de administrador de Econolegal.
 Fuentes jurídicas aseguran que “la situación de Key Mare es compleja y todo apunta a que será difícil que eluda un proceso de liquidación”. Tiene un periodo ahora, Key Mare para negociar una quita con los acreedores y un calendario de pagos de hasta cinco años.
Key Mare, oriunda del municipio murciano de San Pedro de Pinatar, desembarcó en 2004 en Vera y atesora suelo, sobre todo, en el Salar de los Canos (Vera), Almería, Vélez Rubio y El Ejido.
También cuenta con propiedades en Jaén, Granada y Málaga. Hasta hace poco tenía once promociones en marcha y 50 personas en plantilla. Hace unos años edificó 2.500 viviendas en La Cañada de San Julián, que no ha conseguido comercializar en su mayor parte.
Entre sus acreedores se encuentra también el Ayuntamiento de Vera por impago de IBI y compensaciones por convenios urbanísticos.

Torres gigantes Con el consistorio veratense comparte accionariado en la empresa mixta de servicios, Codeur, a través de su filial key Lanzarote.
El pasado año intentó vender el 49% de sus acciones en Codeur por un montante de 7,5  millones a la compañía PWM, una operación que no llegó a fraguar porque el Ayuntamiento ejerció su derecho de adquisición preferente.
Codeur nació con el objetivo de desarrollar las infraestructuras de la costa en un área de 6 millones de metros, en la zona del Salar de los Cano y el Cabezo Largo.
 En esos tiempos de vorágine se llegó a diseñar en ese espacio la construcción de varias torres gigantes que no han llegado a desarrollarse.