La Hermandad Farmacéutica Almeriense extiende su negocio también a Murcia

La Hermandad Farmacéutica Almeriense, una de las principales cooperativas de la provincia, ha conseguido el último año un aumento del 4,4% en ventas con una facturación de 115 millones de euros al cierre de 2013. Su margen comercial suele rondar los 600.000 euros.
La  compañía, presidida por Gádor Villalobos y gerenciada por Jesús Azcona, ha conseguido incrementar su cuota de mercado un 10% en los últimos dos años- el mayor del sector a nivel  nacional- gracias a la creciente demanda de las oficinas de farmacias murcianas por sus precios competitivos.

Polígono San Rafael Este distribuidor de fármacos almerienses, según su gerente, lidera también el ránking nacional en solvencia entre todos los dispensadores de fármacos de España.
La Hermandad Farmacéutica Almeriense (Herafal), con instalaciones centrales en el Polígono San Rafael de Huércal de Almería, trabaja desde hace 58 años en mejorar el servicio a las 330 farmacias asociadas, el 99% del total de despachos. La Hermandad ha conseguido también que se adhieran a la cooperativa las 47 nuevas farmacias adjudicadas por la Junta de Andalucía para hacerles llegar los suministros, lo que explica su crecimiento pese a la bajada del precio de los medicamentos.
Herafal ha saldado también el último ejercicio con la completa implantación de un sistema informático integral   entre todos sus socios.
Herafal suma 60 empleados en plantilla y el 1,10% de cuota nacional de mercado del medicamento.

Toque de corneta La Hermandad Farmacéutica Almeriense forma parte también de Farmanova, una cooperativa de segundo grado compuesta por hermandades farmacéuticas de Málaga, Granada, Jaén, Jerez, Canarias, Baleares y Extremadura que propicia que se puedan obtener mejores precios en los suministros de medicamentos de los laboratorios. Esta cooperativa es un gigante del sector que factura 1.100 millones de euros de forma agregada.
Herafal mueve a diario unas 60.000 unidades a través de 21 rutas diferentes por la provincia con dos repartos, con un valor de mercado de 500.00 euros.
La actividad comienza cada día a la siete de la mañana con el toque de corneta en el cuartel general de la Hermandad en el Polígono de San Rafael.
Los empleados preparan las cajas sanitarias y activan el robot que se encarga de formalizar los pedidos que hacen las farmacias de la provincia para que no falte el Lexatín en Rágol o el Frenadol en Somontín.
En un goteo incesante irán llegando a lo largo del día los furgones prestos a cargar la mercancía y distribuirla en rutas establecidas por todas las boticas de la provincia.
Miles de enfermos almerienses dependen a diario de la labor estajanovista que se ejerce en este espacioso almacén de 4.000 metros ubicados en la periferia de la capital. Su principal activo es la agilidad en el servicio , la capacidad de almacenaje y sus precios competitivo.