Los agricultores aprovecharán sus vacaciones para mejorar su formación

La llegada del final de la campaña en el sector hortofrutícola almeriense ha supuesto el relanzamiento de las actividades formativas destinadas a los agricultores y a los trabajadores, tanto las diseñadas para la mejora del manejo de los cultivos como las encaminadas a la especialización en el sector del manipulado.
Entre los primeros los más demandados son aquellos cursos destinados a mejorar los conocimientos en las técnicas de la producción integrada, la lucha biológica o los diferentes controles tecnológicos que incorporan todos los años los invernaderos.

Manipulado Para los trabajadores de los almacenes la variedad es amplia e incluye desde los cursos de manipulador de alimentos, cada vez más necesarios para obtener las garantías y certificaciones de calidad, o los de operadores de carretillas, un trabajo que requiere un dominio importante para el cumplimiento de los objetivos de movimiento de las mercancías con la mayor agilidad posible en las empresas del sector.
También para el movimiento de mercancías se desarrollan acciones formativas como las que buscan el Certificado de Aptitud Profesional Acreditativo de la cualificación de los conductores (CAP de reciclaje), o las que facultan para la obtención del carnet de conducir tipo C para el manejo de los camiones.

Tecnología Pero son los cursos destinados al aprendizaje en el manejo de las nuevas tecnologías aplicadas a la agricultura los más buscados por parte de los profesionales del campo. El nivel de incorporación de nuevas técnicas en los cultivos está obligando a una formación permanente a muchos agricultores que deben adaptar su forma de trabajo y mejorar las técnicas de manejo de esas tecnologías.
En cualquier caso el interés es creciente, lo cual es valorado como una actitud muy positiva para el conjunto del sector hortofrutícola almeriense. Conocedores de este sector como es Antonio Quirantes, indican que esa demanda formativa es un síntoma inequívoco de la buena salud del campo, porque le prepara para al futuro y le concede una capacidad de adaptación muy elevada que es mucho menos frecuente en otros modelos agrícolas que no se ven impulsados a la incorporación de tecnología ni ven necesaria esa adaptación a nuevas fórmulas para cultivar.
Una de las organizaciones que se muestra más activa en esa labor formativa es la patronal agraria Asaja, que ha reforzado so oferta formativa durante los dos próximos meses y antes el inicio de la nueva campaña, allá por el mes de septiembre. Francisco Vargas, su presidente, afirma que con ello buscan atender las principales demandas de los agricultores asociados. La pasada semana se ponían en marcha cursos de Asaja en municipios como los de Adra, La Mojonera o Palomares, cursos que se extenderán el resto de la provincia durante el verano.