La Asociación de Hostelería de Almería ASHAL está contenta por los niveles de ocupación de los establecimientos este verano, de hecho consideran que es el mejor periodo vacacional en años, pero la satisfacción no es completa porque ese aumento de la ocupación no se ha visto acompañado por un consumo paralelo en establecimientos hosteleros.
En cuanto a la ocupación, la patronal turística confirma que por primera vez en más de un lustro las cifras de ocupación no sólo superan el 90 por ciento en la provincia, sino que afectan a todas las categorías de establecimientos.
Julio, buen mes La patronal de la hostelería destaca el hecho de que esos altos porcentajes de ocupación han llegado en el mes de julio, que en los últimos años había flojeado, y no sólo ha sido bueno para los hoteles de mayor categoría, que habían tenido resultados razonables incluso en los últimos años, sino que la bonanza ha llegado a hoteles de dos o tres estrellas, pensiones, hostales y demás alojamientos.
El mes de agosto se espera aún más positivo en todo tipo de alojamientos y, en el caso de la capital, se espera que muchos de los establecimientos coloquen el cartel de “lleno” durante la semana de la Feria, en la que la ocupación en la capital estará por encima del 90 por ciento.
Bajo consumo Si las cifras de viajeros, alojamientos y pernoctaciones son buenas, no lo es tanto el nivel de consumo en restauración o en ocio de los turistas que están llegando a la provincia durante este verano. Ashal interpreta que los turistas están destinando buena parte de su presupuesto vacacional al alojamiento, en el que invierten buena parte de su presupuesto, dejando poco margen para otro tipo de gastos.
La cuestión es que los datos de ocupación no se corresponden en absoluto con los de consumo en la hostelería; bares, cafeterías o restaurantes están anclados aún en la crisis y sus ventas no logran arrancar de una forma acorde con el aumento de visitantes de estos meses.
Se recuerda también que el coste de viajar a Almería sigue siendo superior al de la mayor parte de las zonas turísticas españolas, con pocas infraestructuras de transporte y precios altos que al final repercuten en un menor nivel de gasto del turista.
Los eventos Los empresarios apuestan por la calebración de más eventos capaces de atraer visitantes con capacidad de consumir. Citan el ejemplo de la Feria de Almería, que llenará los hoteles, o del recientemente celebrado Dream Beach de Villaricos, que supuso una ocupación del cien por cien de las plazas de varias zonas turísticas del levante almeriense.
En Ashal abogan por organizar actividades musicales o culturales con tirón para atraer más visitantes.
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