El consorcio automovilístico General Motors invertirá 356 millones de dólares (329,6 millones de euros al cambio actual) en sus centros de producción estadounidenses de Flint, Saginaw y Grand Rapids, en el Estado de Michigan, para la introducción de una nueva línea de motores y de componentes, según informó la empresa.
General Motors señaló que la factoría de Flint recibirá una inyección económica de 263 millones de dólares (243 millones de euros) para la fabricación de una nueva gama de propulsores, lo que servirá para el mantenimiento de 410 empleos temporales en el centro.
Por otro lado, la compañía destinará 50 millones de dólares (46,2 millones de euros) a la factoría de Saginaw para la fabricación de nuevos componentes de dirección, manteniendo 68 puestos de trabajo.
La instalación de Grand Rapids, por su parte, será objeto de una inversión de 43,35 millones de dólares (40,1 millones de euros) en nuevas piezas para motores, lo que servirá para crear 55 empleos y para retener otros 15 puestos de trabajo.
La empresa destacó que este anuncio se suma a los realizados desde 2009 y que elevan el compromiso inversor de la empresa con el Estado de Michigan a 9.000 millones de dólares (8.333 millones de euros), permitiendo el mantenimiento del empleo y la creación de nuevas oportunidades laborales.
El director de Fabricación de General Motors en Norteamérica, Bill Shaw, afirmó que estas inversiones mejorarán la posición de la corporación y de su plantilla para producir motores y componentes de alta calidad para clientes que demandan mayor eficiencia y prestaciones de los vehículos.
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