“Vox hace populismo con Cataluña y con los bajos precios en la agricultura”

Retirado de la primera fila de la política, Miguel Ángel Castellón regresó para ser diputado por su provincia y prometer desde las filas del Partido Popular “lo que eres capaz de cumplir” y no lo que hacen otros ...

¿Satisfecho por completo o a medias?

Estoy satisfecho por el trabajo hecho y porque hemos aumentado el respaldo respecto a las últimas elecciones. Creo que hemos subido casi cinco mil votos en la provincia. Tal y como veníamos diciendo, la división del centro derecha iba a hacer que la izquierda fuera la que consiguiera más votos y escaños.

Decía su presidente el domingo por la noche que el melón estaba cerrado pero que era previsible el ascenso de Vox.

Sí. Veíamos que Vox estaba recogiendo un voto de protesta que el Partido Socialista desde La Moncloa ha alimentado inteligentemente para sus intereses, no para los intereses de España.

¿Por qué el voto de protesta no lo acapara el PP?

Porque el PP es un partido con responsabilidad de gobierno y nuestro discurso es un discurso responsable, centrado en los problemas y como alternativa de gobierno. Hay cosas que no vamos a decir jamás porque a los ciudadanos no les puedes decir lo que no vas a ser capaz de cumplir. Otros partidos dicen cosas a sabiendas de que no se pueden realizar. Esa es la diferencia entre la demagogia, el populismo, y la responsabilidad.

¿Está acusando de demagogia y populismo a Vox?

Absolutamente. Decir que el problema de Cataluña se resuelve en 24 horas es no decir la verdad, es engañar a los ciudadanos. Decir que el problema de los precios bajos en la agricultura se resuelve cerrando las fronteras de Europa, no es posible en un mundo cada vez más global donde competimos con China, con Marruecos o Turquía. Hay que decir cosas, pero desde una posición moderada, sensata y responsable y, por supuesto, defender los intereses de los agricultores almerienses. Pero no estamos en tiempo de cerrar fronteras en Europa ni dentro de España, que es lo que quieren unos y otros. Los extremos se están tocando por todos los lados.

Les gusta la moderación.

Nos gustan los principios, defender lo que siempre el PP ha defendido: la unidad de España; la economía de mercado; la bajada de impuestos para la creación de empleo y la estabilidad económica e institucional. Más que discurso moderado es discurso responsable.

Aunque les cueste votos.

Por supuesto. La responsabilidad cuesta votos. Si perteneces a un partido que aspira a gobernar tienes que hacer un discurso responsable porque vas a tener que poner en práctica el programa con el que te presentas y la máxima de un político es no mentir a la gente.

¿En qué se basa cuando dice que desde La Moncloa se ha alimentado a Vox?

El presidente ha convocado las elecciones para que coincidiera con la sentencia del Procés con ánimo de agitar la opinión pública española. Y también lo ha hecho con el show mediático que ha montado en el Valle de los Caídos y con una campaña en redes sociales que ha provocado dar mucha cancha a Vox.

El centro derecha suma en Almería 180.000 votos.

Si hubiéramos optado por la coalición España Suma, hoy el centro derecha tendría mayoría absoluta. Y esto ha sido un fracaso para la gente que hoy puede estar muy contenta o muy tristes, porque tenemos de los dos, pero creo que ni una cosa ni la otra. Con responsabilidad hubiéramos sido capaces de sacar a Pedro Sánchez de La Moncloa y por eso una fuerza de centro derecha hubiera ganado las elecciones. Dar la cancha que hemos dado a Pedro Sánchez es poner en sus manos, en la de Podemos y en la de los nacionalistas la gobernabilidad de este país.

¿Qué tiene que hacer el PP para recuperar votos?

Creo que seguir con el discurso que ha implementado Pablo Casado a nivel nacional, ser un partido responsable de gobierno e intentar aglutinar a toda la gente que no quiere tener un presidente como Pedro Sánchez.

¿Le preocupa la perdida de respaldo electoral en sus feudos, desde Roquetas hasta Adra?

Las circunstancias que se han dado en estas elecciones son muy puntuales. Lo que está claro es que la fragmentación del voto de la derecha hace que el voto pueda oscilar mucho. Hace seis meses vimos cómo, prácticamente, empatábamos las elecciones con un partido político que prácticamente ha desaparecido. En un estado general de ánimo, como el que hemos vivido en España, se han dado estas circunstancias. En otro estado general se darán otras.

O sea, que el PP puede recuperarse.

No me cabe la menor duda. El PP tiene el proyecto de centro derecha más consolidado, más responsable a nivel provincial, autonómico y nacional, y alrededor de esto podrá pivotar muchas cosas. Esa base sólida existe.

¿El resultado del Senado puede ser un ejemplo de esa recuperación?

Por supuesto, pero es una pena que no hayamos sacado los tres senadores o los cuatro si hubiéramos hecho las cosas bien hechas, porque tenemos votos para sacar los cuatro con 180.000 votos de las fuerzas de centro derecha.

¿Cree que habrá terceras elecciones?

Sería un drama si Pedro Sánchez nos abocara a unas terceras elecciones.