Kiko Medina, la huella de un productor único: así lo recordará el festival

El prematuro fallecimiento del productor almeriense Kiko Medina, desaparecido a los 47 años el pasado mes de octubre, deja al Festival Internacional de Cine de Almería huérfano de una de sus presencias más carismáticas, un rostro habitual en el patio de butacas, presentando las producciones que impulsaba o participando en distintos foros. Un vacío que será complicado de cubrir y una figura que seguirá presente en la huella que entre sus compañeros ha dejado uno de los profesionales que más han luchado por dignificar su sector. 

El destino ha querido que dos de las títulos más recientes en los que trabajó compitan en sus respectivas secciones oficiales: el corto ‘Alimezher’, de Liteo Deliro, que produjo a través de KMPC, y ‘La vida era eso’, de David Martín de los Santos, largometraje en el que ejerció como jefe de producción.

Además, el festival le rendirá homenaje a través de distintas iniciativas: su recuerdo tendrá presencia en la gala del audiovisual almeriense y en el ciclo ‘Almería, tierra de rodajes’ se podrá ver el documental ‘Almería, 1975. El cine que nos hizo libres’, dirigido por Juan Gabriel García y producido por él, quien también concibió la idea original, a través de KMPC, la productora que creó en 2014.

Hace cuatro años, en 2016, Kiko Medina recibió en el festival el premio Asfaan por su trayectoria. Ese mismo festival que ahora le llora también, de forma tan sutil como emotiva, a través del spot promocional de esta edición.