Unanimidad ante la belleza del Parque Natural de Cabo de Gata-Níjar

Si la belleza está en los ojos del que la mira, tal y como dice la conocida frase, la vista y todos los sentidos se ponen de acuerdo al contemplar el Parque Natural de Cabo de Gata-Níjar, haciendo que de forma unánime todos se rindan al encanto del lugar. El municipio de Níjar tiene el honor de contar con el 70 por ciento de este territorio único en Europa y toda su costa enclavada en este entorno natural. Cada rincón sorprende y hace vibrar los sentidos al contemplar el poder de la naturaleza que siglo tras siglo ha ido creando una zona como ésta en el sureste español.

De gran riqueza geológica, histórica y natural el Parque ha ido convirtiéndose en un lugar de referencia para los admiradores de la tranquilidad y playas vírgenes, que quieran sorprenderse con las distintas formaciones costeras y playas recónditas. Una tierra que la escritora, periodista y activista por los derechos de la mujer, Carmen de Burgos “Colombine”, describía en sus obras, su Rodalquilar, donde pasó gran parte de su infancia. El 150 aniversario de su nacimiento se conmemora este año para rendir homenaje a esta adelantada a su tiempo. El paisaje indómito de su infancia, seguro influyó en sus libros y en su personalidad.

El valle de Rodalquilar es un antiguo cráter de origen volcánico, tal y como era el carácter de Colombine. Hoy el valle es un oasis en el que la vegetación ilumina los dorados de la sierra y dan paso al azul intenso de la costa. Rodalquilar, La Isleta del Moro, Los Escullos, San José o Las Negras conservan reminiscencias de su dilatada historia, de su tradición marinera y carácter acogedor, convirtiéndose en un lugar de parada obligatoria en un recorrido por el municipio de Níjar.