“El rociero lo es todo el año, hay que hacer, de cada día, lunes de Pentecostés”

¿Es la romería el momento más esperado por los miembros de su Hermandad?

La romería es el acontecimiento más importante en el calendario de un rociero, y la fecha más esperada y deseada por una hermandad.

Este año ha tocado vivir la romería de una manera diferente.

Este año, el Rocío ha sido diferente, lo hemos vivido un poquito con nostalgia, ya que para nosotros era el primer año como hermandad. Ha sido todo a través de redes sociales, subiendo momentos vividos en el camino y en la ermita frente a la Blanca Paloma.

Por cierto, una suerte poder tener cerca a un buen sacerdote rociero como es D. Jesús Zapata.

Tener a D. Jesús Zapata Rueda a nuestro lado es un orgullo para nuestra hermandad, ya que además de ser nuestro consiliario, es nuestro párroco y, sobretodo, amigo, rociero de los pies a la cabeza y muy devoto de la virgen del Rocío.

Este tiempo de espera han estado unidos a la Hermandad del Rocío de la capital.

Estos días, hemos estado unidos a través de redes sociales como he dicho antes, subiendo fotos y vídeos de momentos vividos en el Rocío, y con nuestra hermandad  madrina, la hermandad del Rocío de Almería.

¿Qué les diría a los hermanos de su hermandad en este Pentecostés?

A todos los hermanos les diría que Pentecostés es un día muy grande para todos los que somos rocieros, que por causa de esta pandemia, no podemos estar delante de la Virgen del Rocío, pero que tenemos que vivirla y sentirla muy de cerca a pesar de la distancia. Es nuestra madre y una madre siempre nos protege, no ha querido poner en riesgo nuestras vidas. De alguna manera logrará que todo esto pase pronto y podamos peregrinar y reunirnos para cantarle y rezarle como todos los rocieros sabemos.

¿Cuentan ya los día que faltan para la romería de 2021?

Siempre hay ganas de ir a ver a la Virgen del Rocío. Es cierto que este año, por las circunstancias que sabemos todos, no ha podido ser, pero si iremos el próximo año, Dios mediante, con  más ganas, más fuerza y más entusiasmo si cabe. A partir del lunes de Pentecostés, contaremos los días que nos faltan para ir a verla. Hasta entonces, viviremos el Rocío en la distancia. La persona que es rociera lo es todo el año y hay que hacer, de cada día, lunes de Pentecostés.