Adiós a las monjas que han criado a varias generaciones desde hace 50 años

Dalías está de despedida. Una mezcla de agradecimiento y nostalgia ha llegado a centenares de casas del pueblo almeriense, que llora inevitablemente la marcha de una comunidad que ha formado parte del día a día y de la vida de miles de familias en el último medio siglo: las Religiosas de la Asunción se van de Dalías.

Por este motivo, la parroquia de Santa María de Ambrox acogió el pasado viernes una celebración muy especial. Presidida por el Vicario de Pastoral, Francisco Sáez, en representación del obispo de la Diócesis de Almería, la misa estuvo acompañada por otros seis sacerdotes más, hijos del pueblo de Dalías y antiguos párrocos de la iglesia en la que se custodia al Cristo de la Luz. Junto a ellos, las Religiosas de la Asunción y un notable número de dalienses acudieron en acción de gracias a Dios por los 52 años que ha pasado allí esta congregación que ahora se marcha.

Fue en el año 1973 cuando el entonces párroco de Dalías, Francisco Rodríguez Casas, vio la necesidad de crear una guardería parroquial para cuidar y poner en marcha la educación de los hijos de aquellas familias que empezaban a trabajar en los primeros invernaderos de la provincia de Almería. Fue entonces cuando se materializó la llegada a Dalías de las Religiosas de la Asunción, una congregación fundada por Santa María Eugenia y que ha dedicado su entrega a la educación de muchas generaciones de dalienses en la fe. 

Tanto la Diócesis como la propia comunidad de Religiosas de la Asunción comparten una reflexión: es una dura despedida que deja algo bueno. En palabras de Francisco Sáez, "la tristeza humana por la marcha de las religiosas se tiene que iluminar con la fe agradecida a Dios por todo lo sembrado por ellas en esta comunidad". Por su parte, las Religiosas de la Asunción recuerdan a través de su web que "hace nada celebrábamos con alegría y cariño los 50 años de su presencia en Dalias y ahora nos toca decirles adiós". Y con ese mismo sabor agridulce y esperanzado que comentaba Sáez, las religiosas exponen que "al mismo tiempo estos 52 años nos tienen que hacer más fuertes, estamos convencidos como grupo de Asunción Juntos Dalias que lo que ahora nos parece una debilidad tiene que ser una fortaleza, todos estos años no nos han dejado indiferentes, nos tienen que servir de soporte y de guía en el camino que tenemos por delante".

En la misa, las monjas agradecieron a Dios que durante estos años Dalías y la Asunción han llegado a ser una sola cosa, que tres vocaciones dalienses se unieron a esta congregación: María José García, Loli Avalos y Lola Herrera, desde hace poco nueva provincial en España de estas religiosas, y que las familias de Dalías les confiaran lo más preciado: sus hijos, el futuro de esta ciudad.

El regalo de un reloj para cada una de las Religiosas de la Asunción que 'cierran la puerta' de la comunidad de Dalías (para que no olviden el tiempo compartido) y un aperitivo puso punto final a una tarde "de sentimientos encontrados", tal y como afirman desde la Diócesis de Almería a través de su web.