Un sector que ha garantizado el suministro durante la crisis

Estos meses se está cumpliendo un año desde que el coronavirus llegase a cambiar la vida de todos tal y como la conocíamos.  A lo largo de este tiempo, se ha vivido un confinamiento que paralizó la gran mayoría de sectores laborales y, con ello, la economía. 

Sin embargo, hubo algunos ámbitos en los que no se pudo parar. El sanitario, como es lógico, fue uno de ellos, con médicos, enfermeros y demás personal dando la cara en los meses más terroríficos de la pandemia. Sin ellos no se habría salido adelante. En Almería llamó la atención también la eficiencia del sector agroalimentario, y es que los agricultores y las empresas no pararon ni un momento con el objetivo de seguir suministrando alimentos a los hogares de medio mundo. Todos ellos, en mayor o menor medida, recibieron el reconocimiento de una sociedad agradecida y entregada.

Pero hubo otro sector que no se detuvo en ningún momento: el de transportes. Los transportistas continuaron realizando su labor, llevando el producto de un lugar a otro y garantizando así el suministro de fármacos, alimentos y material sanitario fundamental durante los meses más críticos de la pandemia.

La actividad crece

Pese a que en un primer momento el sector se vio duramente golpeado por este parón productivo que afectó a la mayoría de empresas, lo cierto es que el transporte por carretera se ha consolidado en este año como la forma más segura de garantizar un envío en esta época de pandemia.

Con el transporte aéreo duramente restringido, los vehículos de carretera como furgonetas o camiones han sido una vía de escape para aquellas empresas que han seguido funcionando a pleno rendimiento.

Tal es así que el sector transportes está aproximándose a las cifras que movía antes de la pandemia. Así lo demuestran los números del último trimestre de 2020 y los primeros meses de 2021, que atisban una mejoría en la economía y, por tanto, un incremento de los transportes de media y larga distancia.

Son, sin duda, datos para la esperanza y para el optimismo que demuestran la importancia vital de un sector como este que sirve para garantizar que todo continúe fluyendo con normalidad hasta en una época en la que la normalidad no tiene cabida, como es la actual.