El Ayuntamiento de El Ejido y el Colegio de Veterinarios de Almería estudian ya la elaboración de un censo canino y un registro genético que contemple la identificación por ADN de toda la población canina del municipìo y de los dueños de las mascotas. El objetivo que se persigue con esta medida es acabar con los excrementos de los perros en las vías pública, no solo por el impacto visual que producen sino por el riesgo que suponen para la salud de los niños cuando las mascotas hacen sus deposiciones en zonas verdes.
La puesta en marcha de esta herramienta permitirá identificar a los titulares de los perros que no cumplan con las normas cívicas y que no recojan las cacas de los animales. Mediante la creación de un registro con información genética de los perros que residen en el municipio, se podrá identificar al titular del animal y proceder con ello a la pertinente sanción.
A partir de ahora, los propietarios de perros estarán obligados, a través de una ordenanza municipal en proceso de elaboración, a someter a sus perros a una prueba muy simple: un análisis de sangre del que se obtendrá la huella genética, explica la concejala Luisa Barranco, responsable de las áreas de Turismo, Comercio y Sanidad. Será el Colegio de Veterinarios quien realice las pruebas sanguíneas a los perros y también se encargará de la creación de sus huellas genéticas. En el municipio de El Ejido hay actualmente 16.000 perros registrados, que deberán de contar en unos meses no sólo con el micro-chip, como hasta ahora, sino con la identificación única e imborrable de su ADN.
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