La planta de gestión de residuos del Poniente se pondrá el huelga a partir del 18 de junio

Después de meses de negociaciones entre la UTE Poniente-Befesa FCC y los representantes de los trabajadores, el comité de empresa -integrado por los sindicatos UGT, CC.OO., USO y CSIF-, ha convocado una huelga indefinida a partir del próximo 18 de junio en la planta de reciclaje de residuos sólidos del Poniente al considerar “rotas” las vías de acuerdo con la empresa. La planta, en la que trabajan actualmente 72 personas, gestiona el tratamiento de residuos sólidos de más de cien municipios (incluídos los del Bajo Andarax) y recibe en torno a 150.000 toneladas de basura al año, el doble que la planta de la capital. 

“Hemos llegado a esta decisión viendo que la empresa no llega a un razonamiento con nosotros. Estamos todos unidos y tenemos claro que nos iremos a un paro indefinido si no hay un cambio de actitud por parte de la dirección”, explicó ayer a este periódico José María Rodríguez, miembro del comité de empresa. Esta mañana, a las 10:00 h., los sindicatos presentarán en el Sercla (Sistema Extrajudicial de Resolución de Conflictos Laborales de Andalucía) su propuesta de servicios mínimos, que se pactó ayer por la tarde.

Los trabajadores piden un incremento del 3 por ciento en los sueldos después de tres años de congelación salarial, pero la empresa, por ahora, solo ofrece un incremento del 0´5 por ciento para el año que viene. En el actual, no aplicaría ninguna subida. Esta circunstancia es considerada “intolerable” para los trabajadores que, además, critican que la empresa no esté aplicando de manera correcta los complementos de nocturnidad, toxicidad-peligrosidad y penosidad establecidos en el convenio general del sector con carácter obligatorio. “Están ofreciendo estos complementos en menor cuantía”, se señala desde el comité. 

A todo ello, los empleados de la planta de reciclaje y tratamiento de residuos denuncian que han dejado de percibir 1.650 euros por un plus de vestuario que se creó en 2012 y que se eliminó ese mismo año. Según explican, ese complemento suponía unos ingresos más por trabajador de 550 euros al año en 2012 y de 1.100 euros en 2013. De momento, en todo este tiempo, no han visto un euro en sus nóminas por este concepto. 

Por otra parte, y aunque no forme parte del grueso de sus peticiones, el comité de empresa se queja también del “mal estado” de la planta, en la que, aseguran, se ha hecho una “inversión cero” desde que se construyó, en el año 2002. “Llevamos catorce años con la misma maquinaria fija, tratando la basura de toda la provincia si exceptuamos la capital y el Levante, y lo hacemos todo manual”, aseguró ayer uno de los portavoces del comité de empresa de la planta, José María Rodríguez. 

El pasado 25 de mayo, los presidentes de los Consorcios de Residuos Sólidos del Poniente y el Sector II, los alcaldes de El Ejido y Gádor, respectivamente, Francisco Góngora y Eugenio Gonzálvez, ya le hicieron llegar a la delegada del Gobierno, Gracia Fernández, la necesidad de una nueva inversión en las plantas para incorporar tecnología que permita garantizar el servicio. La inversión mínima acordada sería de 10,5 millones de euros.