La Feria del Mediodía cambiará de formato con cuatro casetas independientes

Cuatro cofradías se encargarán de gestionar las correspondientes barras de manera gratuita 

Zona que hace las veces de recinto ferial y donde se instalarán las barras.
Zona que hace las veces de recinto ferial y donde se instalarán las barras.
Guillermo Mirón
21:38 • 03 oct. 2016

Corría el año 1999 cuando una polémica decisión hizo que las antiguas casetas de obra del Recinto Ferial protagonizaran su primer titular. “Partidos políticos y colectivos sociales solicitan una reunión al alcalde -que entonces era el popular Francisco Granero- para tratar la demolición de las casetas municipales”. No sirvió de mucho.
Pocos meses después, las casetas eran demolidas y se daba paso a un modelo de feria que por aquel entonces irrumpía: concentrar todas las barras y la fiesta en un mismo espacio público con la aparición gradual -y posterior- de una feria del mediodía que comenzaba a ganar protagonismo frente a la noche.




La próxima Feria de Todos los Santos de Albox (entre el 28 de octubre y el 2 de noviembre) volverá a sus raíces más recientes. Si bien no se remontará a sus remotos orígenes como una de las principales ferias de ganado de la nación, sí rescatará (aunque de manera prefabricada) aquellas casetas independientes donde se podían respirar diferentes ambientes. Esta feria de 2016 contará así con cuatro casetas de 300 metros cuadrados cada una situadas en la zona del Recinto Ferial.  Las barras estarán gestionadas por las cofradías del pueblo, que de este modo regresarán a la Feria de Albox tras años de ausencia en el caso de la mayoría de hermandades.




Ubicación
Las nuevas casetas se instalarán en una explanada del Recinto Ferial muy cercana a la Carpa Municipal que hasta ahora acogía tanto la feria del mediodía como la de la noche. En los últimos años se ha abierto un debate por un modelo de feria que parece agotarse. De hecho, la necesidad de un cambio de formato era una cuestión que estaba sobre la mesa del Consistorio desde el término de la última Feria de Todos los Santos.




Con esta decisión se volverá a dejar la tradicional Caseta Municipal para un uso nocturno pensado especialmente para las personas de mayor edad que, durante los últimos años, no han encontrado un lugar específico donde disfrutar de manera más serena de las fiestas o para disfrutar de sus espectáculos sin interrumpir la música o las actuaciones propias de la feria del mediodía.




Objetivos
Así las cosas, las casetas independientes estarán a pocos metros de la Caseta Municipal, que dispondrá de 1.200 metros cuadrados y abrirá cada tarde-noche. En ella tendrán lugar, por lo tanto, las actividades como las actuaciones folclóricas, de orquestas y los conciertos, como será el del cantante albojense Ángel Capel en la noche del viernes. “Hemos tomado esta decisión porque era un formato que estaba demandando la ciudadanía, simplemente por eso”, ha explicado Francisco Torrecillas, alcalde de Albox.




La Feria de Albox volverá a contar así con varias zonas dentro de un mismo Recinto Ferial destinadas a colectivos diferentes pero que, a buen seguro, encontrarán momentos para la mezcla y la diversión conjunta. Lo que no cambia será el lugar y la fecha del pregonero de la Feria de Todos los Santos de 2017. Tendrá lugar el sábado de feria, 29 de octubre, en el salón de actos Federico García Lorca del Ayuntamiento. Todo preparado por lo tanto para una feria que, como poco, promete ser diferente.

Abierta a barras de gestión privada en 2017
Pese a que en esta feria las cofradías serán las únicas que gestionarán las nuevas casetas, el regidor, Francisco Torrecillas, ha señalado que “a partir del próximo año pensamos ampliarlo también a barras privadas”. Será “una vez que veamos cómo funciona el formato este año y analicemos cómo ha ido”. Si es acepado por los vecinos, Torrecillas adelanta que “lo ampliaremos a otras entidades privadas”. Con el cambio de formato se acaba también con una decisión que el Ayuntamiento tomó en 2010, cuando pidió por primera vez un pago a las cofradías por la gestión de las barras. La decisión causó malestar en las hermandades, por lo que tuvieron lugar varias reuniones y negociaciones sin acuerdo, haciendo que muchas optaran por dejar de gestionar una barra. Esta feria, seis años después, no pagarán.






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