La Consejería de Medio Ambiente y Ordenación del Territorio solicitará ante la Sala de lo Contencioso Administrativo del Tribunal Superior de Justicia de Andalucía (TSJA) la ejecución inmediata de la sentencia del Tribunal Supremo (TS) en la que declara legal el derecho de la Junta de Andalucía para ejercer el retracto sobre los terrenos en los que se asienta el hotel del Algarrobico.
Según informaba ayer el departamento que dirige José Fiscal en un comunicado, esta medida se llevará a cabo una vez que las empresas constructoras Azata del Sol y Azata Patrimonio S.L no han comparecido este viernes en la sede de la Delegación Territorial de Medio Ambiente en la provincia de Almería para poder formalizar el retracto y cumplir de forma voluntaria la sentencia del Supremo.
Plan de actuación
La solicitud ante el Tribunal Superior de Justicia de Andalucía la realizarán los Servicios Jurídicos de la Junta, en coordinación con los del Gobierno de la Nación, en los términos establecidos por el plan de actuación conjunto aprobado por ambas administraciones.
La Consejería de Medio Ambiente considera, tras la incomparecencia de ayer, que la ausencia de estas dos mercantiles para ejecutar el retracto y acatar así la sentencia del Alto Tribunal pone de manifiesto "su falta de colaboración con la administración de la Junta de Andalucía y, lo que es más preocupante, con la propia Administración de Justicia".
Según la administración autonómica, la formalización del derecho de retracto sobre los terrenos en los que se asienta el hotel es "el primer paso para que, una vez que se tenga la posesión de los mismos, se pueda proceder a la demolición del edificio".
Diez años de espera
La Junta ha recordado que cuando ejerció en el año 2006 el derecho de retracto, consignando el precio de compraventa en escrituras en 2,3 millones de euros, se presentaron tres recursos que fueron desestimados por tres sentencias del Tribunal Superior de Justicia de Andalucía, contra las que se anunciaron recursos de casación. Si la constructora hubiera aceptado este viernes la ejecución de ese derecho de retracto, habría recibido esa cantidad a cambio de los suelos y el Gobierno y la Junta habrían podido comenzar la demolición.
En concreto las dos empresas propietarias del hotel, Azata Sol y Azata Patrimonio, presentaron sendos recursos de casación que fueron desestimados el pasado mes de febrero por el alto tribunal, confirmando así la legalidad del procedimiento puesto en marcha desde la Junta.
El gerente de Azata del Sol, José Rodríguez, ha manifestado que los representantes de su empresa se han ausentado del acto administrativo porque "no estamos de acuerdo con el retracto" y comunicaron su decisión "por burofax" a la Delegación Provincial de Medio Ambiente, lugar en el que se iba a producir la reunión este viernes.
Larga historia
El 21 de febrero de 2006, un juez de Almería dictó un auto que paralizó las obras de este hotel situado en el Parque Natural de Cabo de Gata-Níjar, en el término municipal de Carboneras cuando llevaba más de un noventa por ciento de su ejecución realizado, dado que había comenzado a levantarse en 2003 con el visto bueno del Ayuntamiento de Carboneras y la Junta de Andalucía.
A partir de aquella primera sentencia se ha desarrollado toda una batalla judicial entre colectivos ecologistas, administraciones públicas y la empresa promotora del hotel, que además de este establecimiento había hecho planes para poder ejecutar un desarrollo urbanístico en esta zona. Una disputa que se cerró cuando los tribunales determinaron definitivamente que el hotel y el resto de proyectos previstos se asentaban sobre suelos protegidos.
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