Propietarios de Cabrera llegan a las manos por el futuro de sus casas

El futuro de la urbanización de Cabrera está en manos de sus propietarios, pero la tensión queda muy patente a la hora de plantear soluciones de futuro, tal y como se vio el pasado jueves en la reunión promovida por  Abusos Urbanísticos Almanzora No, (AUAN), para que los residentes conocieran las distintas propuestas que se plantean, incluida el sistema de cooperación firmado en el Decreto del alcalde que rompe con la gestión por compensación.

Desde Somos Turre, Martín Morales finalmente se ha echado la manta a la cabeza y ha cambiado la Junta de Compensación a un sistema de Cooperación para la urbanización de Cabrera. La decisión ha tenido que ser tomada por Decreto de Alcaldía, sobre todo, cuando no ha contado en ningún momento con el respaldo de PP ni de su socio de Gobierno, el PSOE. A ello se suma que la única concejal de Somos Turre que lo acompaña en la Corporación también le ha negado el respado al cambio.

Morales es en la actualidad alcalde por pacto de Gobierno con el PSOE y, según el acuerdo, lo será hasta febrero. Así quedó patente en la reunión celebrada con más de 90 propietarios afectados, puesto que los dirigentes de PP y PSOE no dudaron en hacer referencia a la futura Alcaldía presidida por Isabel López, para dar carpetazo al Decreto firmado el pasado 8 de octubre.

Reunión
Una vez que ya el cambio legislativo de la compensación a la cooperación se ha hecho efectivo, AUAN tomó la iniciativa de reunir a los afectados con los representantes de todas las posturas que entran en juego. Más aún cuando 23 años de servicios deficitarios y más del 80% de las viviendas sin licencia de ocupación no han hecho más que dividir a los residentes. La tensión era palpable en cada una de las intervenciones entre partidarios y detractores  de las posturas y también por antipatía manifiesta contra algunos respresentantes políticos. Así, técnicos independientes, abogados de las partes afectadas e, incluso, políticos, no dudaron en pedir respeto y diálogo para cerrar un acuerdo en el que todos se vean perjudicados en la menor medida.

Tensión
El punto máximo de tensión se produjo cuando varios propietarios llegaron a las manos y muchos fueron los que tuvieron que separarlos.

Es la consecuencia directa de un problema enquistado veinte años , explicaba Morales. El actual dirigente insiste en que  se ha inclumplido el proyecto de urbanización y sólo se ha ejecutado un 39%, según los informes municipales, lo que lo avaa en su cambio de gestión.  Se trata de una situación similar a las de otras urbanizaciones del municipio, explicaba el ex alcalde popular Arturo Grima.

Coincidía con el PSOE y los representantes de la actual Junta de Compensación en que la medida adoptada por el alcalde es inviable para la situación económica del Ayuntamiento; ni en medios materiales ni financieros. Así, desde AUAN se pide mesura y reflexión, puesto que todas las salidas son legales y todas se sostienen, sin excepción, sobre la base de que el último que paga es el propietario, les guste o no.

El sueño del jubilado por los suelos
En la actualidad en esta zona hay unas 200 viviendas esperando obras de urbanización y de saneamiento. Comenzaron a construirse a comienzo de los años 70, pero el plan parción no llegó hasta el 85 y la división en sectores en el año 2008.

Para la mayoría de los propietarios la prioridad está en legalizar sus viviendas, con el agravante de que nadie ha puesto sobre la mesa costes reales del planeamiento al que tendrán que hacer frente, y la incertidumbre de si llegarán a un acuerdo y  acercarán con la solución más adecuada a sus intereses.

Además, para muchos nuevos pagos serían inviables. En la actualidad hacen frente a un pago comunitario de unos 200.000 euros anuales.