El alcalde se da más poder porque está solo

El Plenario del Ayuntamiento de Turre volvió al uso del término “decretazo” para hablar de la gestión del alcalde Martín Morales desde que se afianzaron las diferencias entre los socios de Gobierno. Tres decretos han sido los que han dado un mayor poder de gestión al responsable municipal en las últimas semanas, en detrimento de los miembros de la Junta de Gobierno, y le han servido para sacar adelante dos de los proyectos más controvertidos en esta Corporación.

Cabrera volvió a centrar el debate plenario, con la propuesta de Alcaldía de llevar al Consejo Consultivo lo que considera incumplimientos en la gestión del planeamiento de la urbanización. Precisamente, dichas irregularidades fueron las que llevaron al alcalde a asumir en solitario las riendas, por Decreto, del cambio de gestión en la sierra de la conservación a cooperación.

Además, Martín Morales ha asumido la competencia, antes compartida con algunos de sus socios de Gobierno, PSOE y su compañera de filas en Somos Turre, para la contratación en proyectos de coste inferior al 10% del presupuesto de base.

No fue en ningún momento bien acogida la decisión del dirigente municipal, tampoco por su compañera en las pasadas listas municipales, María Luisa Cervantes, quien preguntó abiertamente al alcalde si reconsideraría la decisión de dejar prácticamente sin poder decisorio a la Junta de Gobierno.

Habrá reconsideración, incidió el alcalde, aunque también matizó que legalmente un municipio de los habitantes de Turre no está obligado a este tipo de organismos y son muchos los municipios que centran su gestión en la figura del alcalde.

Paseo
La avenida de Almería también llegó al debate a través del Decreto que ha aprobado el proyecto. La firma del alcalde será así la que permita una actuación “provisional” que no se acepta ni desde las filas del PP ni desde el equipo de Gobierno. El propio alcalde también se muestra a la espera de un proyecto completo para esta arteria principal.