San Sebastián y San Ildefonso le ganan el pulso a la lluvia y el frío

La devoción por San Sebastián y San Ildefonso, patrones de Olula del Río, pudo más que la lluvia en el día de ayer. A pesar del agua que no dejaron de caer durante buena parte de la mañana, numerosos olulenses acompañaron a San Sebastián y San Ildefonsso en su camino a la iglesia de la Asunción.

La festividad patronal que dio comienzo en la noche del jueves con el espectáculo de las carretillas y que se reproducirá el domingo y el lunes supone, con diferencia, la fiesta las más tradicional de las que se celebran en el pueblo. Durante el recorrido por las calles, los anderos sostienen a los patrones olulenses  mientras, a su alrededor, los vecinos y visitantes se hacen sitio para conseguir los roscos que caen del cielo o, más bien, de los balcones de las casas frente a las que desfilan.

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Es cierto que en la mañana del viernes, además de los roscones, cayó sobre los asistentes abundante agua pero no eso no impidió que la tradición siguiera un pie un año más. La noche anterior las carretillas (cilindros rellenos de pólvora) llenaron de luz y sonido las calles de este pueblo del Almanzora que se viste con sus mejores galas.

El espectáculo protagonizado por la pólvora volverá a las calles olulenses el domingo por la noche. Será, como manda la tradición, en la víspera de una nueva procesión en la que, además de los patrones, los roscos y las rosquillas marcarán el paso a miles de asistentes que cada año se dan cita en Olula del Río gracias a la organización del Ayuntamiento y de las Peñas de San Sebastián y San Ildefonso. La procesión más multitudinaria tendrá lugar el lunes, día festivo en el municipio, a las doce del mediodía. Después, a las dos de la tarde, comenzará la Feria del Mediodía con una gran paella y atracciones infantiles.

Unas fiestas “diferentes, extraordinarias y entrañables”, tal y como indica el alcalde, Antonio Martínez Pascual, que añade. “Quien viene repite”. Ya saben, si acuden este año, Olula del Río les acogerá de nuevo, a buen seguro, en 2018.