“Quería comprar una casa pero ahora prefiero esperar al brexit”

Ocurrió el miércoles 29 de marzo. La primera ministra de Reino Unido pisó el acelerador del brexit estampando su firma en la carta con la que su Gobierno comenzaba el proceso de retirada de la Unión Europea (UE). Horas después, un sonriente embajador británico de la UE entregó la carta al presidente del Consejo Europeo en un gesto que, pese a su aparente amabilidad, puede suponer un disparo de muerte a las expectativas de sus compatriotas en España y de no menos españoles.

De hecho sus consecuencias no se han hecho esperar. A falta de que se esbocen posibles acuerdos bilaterales entre Gran Bretaña y países europeos, la incertidumbre es la primera en llegar, como siempre que se avecinan cambios. Es un factor intangible e incontable, pero ya pasa factura.

Planes truncados “Estaba planeando comprar una casa por esta zona pero ahora prefiero esperar a ver qué pasa con el brexit”. Así lo reconoce Keith, un inglés de visita en Albox, donde viven otros amigos compatriotas. Es paradójico que su propio voto le haya truncado parte de sus planes de futuro. Metió la papeleta a favor del brexit en el referéndum celebrado el pasado mes de junio. En la provincia de Almería residen más de 20.000 británicos que son un pilar fundamental para la economía de pueblos como Albox, Zurgena o Arboleas. En éste último, la población anglosajona representa más de la mitad de sus cinco mil habitantes. Al cobijo de su llegada durante el ‘boom’ inmobiliario nacieron cientos de negocios de todo tipo que han sobrevivido a la crisis gracias al turismo residencial. Restaurantes, videoclubs, tiendas de ropa, cafeterías... Lo sabe bien Lynda. Disfruta de su jubilación jugando a los bolos en Arboleas. Cree que “España y Gran Bretaña alcanzarán un acuerdo porque hay muchos españoles en Reino Unido y los  ingleses que viven aquí gastan todo su dinero en España”.

Su compañera de partida, Joyce, reconoce que “si viviera en Inglaterra habría votado salir de la UE pero como vivo aquí estoy un poco preocupada”. Su “principal preocupación” es la posible pérdida de derechos como “la asistencia sanitaria”. Un tema, el sanitario, que no es menor. La inmensa mayoría de los británicos llegados al sureste peninsular son jubilados y no pocos requieren de una constante atención médica.

Terror económico A unos kilómetros de la bolera, en una terraza de Albox, se encuentra un grupo de amigos entre los que figura Keith, el británico que ha frenado sus planes para invertir en España tras el brexit. Junto a él está Alan, el amigo al que está visitando y que reside en Albox.

No se anda con medias tintas en sus previsiones sobre un brexit sin acuerdos. “Sería terrorífico para la economía de Mojácar. Y Albox, Arboleas...”, sentencia. Pese a todo, él no sería uno de los que contribuirían a esa catástrofe económica. En sus planes no figura volver a su país natal. “I love Spain. Me quedaría aquí. De ninguna manera volvería. Yo voté permanecer en la Unión Europea”.

Alan se muestra tan seguro porque en el fondo, al igual que la mayoría de sus compatriotas afincados en la provincia, cree que se alcanzará un acuerdo. “Creo que el gobierno español no pondrá problemas”. Pese a no vivir en España, su compañero de mesa y de cervezas piensa igual. “La economía española depende mucho de la inversión británica. De la gente que vive aquí”. Son menos pero también los hay optimistas incluso si no hay un compromiso para asegurar los derechos de los españoles en UK y de los británicos en España.

Simon llegó a Zurgena desde Liverpool hace ya doce años. Disfruta en la terraza de la bolera aunque regenta su propio restaurante en Albox. Se muestra reacio a hablar “de política” pero tiene una cosa clara. “Mi futuro no dependerá del gobierno de mi país” y pasa a enumerar la nacionalidad de otros clientes de su negocio. “Belgas, franceses, alemanes, también van españoles... Albox es multinacional, no solo hay ingleses”. En el interior, Joyce, una de las aficionadas a los bolos, se despide con una declaración de intenciones que, más bien, es un deseo. “Espero que haya acuerdos bilaterales. No pienso volver”. 

Almería desaparece del mapa en la prensa británica
Una de las imágenes que más han dado que hablar durante los últimos días ha sido sin duda la del embajador británico en la Unión Europea entregando la carta con la que se formaliza el brexit. Sin embargo ha habido otra imagen que ha sido muy aplaudida por la manera de representar la situación en la que está inmersa Gran Bretaña tras el miércoles. Y no solo Gran Bretaña. La portada del prestigioso periódico inglés ‘The Guardian’ titulaba “Hoy Reino Unido se adentra en lo desconocido”, con un puzzle de Europa en el que faltan piezas clave como Reino Unido.

La portada ha sido aplaudida internacionalmente por su certera lectura de la situación británica y el modo de ilustrarla, aunque no solo por ello. En España ha llamado la atención el hecho de que la pieza que representa Gran Bretaña no sea la única que falte en ese gran puzzle. En el mapa también ha desaparecido Almería. Casualmente o no, tampoco aparece gran parte de la costa valenciana y otras zonas turísticas como el Algarve portugués. Se trata de destinos escogidos por los británicos de manera masiva para pasar sus vacaciones o bien adquirir una segunda vivienda, por lo que muchos dudan de la casualidad como origen de la curiosa imagen que ocupó la portada de ‘The Guardian’ que ha dado la vuelta al mundo y publicada con motivo de la entrega de la famosa carta.

Asociaciones El inicio del brexit ha motivado que en los rincones ‘devorados’ por la incertidumbre, como representó ‘The Guardian’, estén naciendo asociaciones y colectivos para defender los intereses de los británicos residentes en la Unión Europea. Uno de estos colectivos denominado ‘Europats’ está encabezado por Jim Simpson, vecino pero además concejal en el Ayuntamiento del municipio de Zurgena.

El brexit también ha sembrado de dudas la posibilidad de que en las próximas elecciones municipales ciudadanos de origen británico no puedan presentarse en las candidaturas. Pueblos como Arboleas, Albanchez, Partaloa o la propia Zurgena cuenta con ‘expatriados’ en sus corporaciones. La intención de asociaciones como ‘Europats’ es defender derechos como el de figurar en una lista electoral o el derecho al voto. De hecho, miembros de esta asociación ya se han reunido con representantes públicos como los presidentes de las mancomunidades de municipios del Levante y del Valle del Almanzora.

De la misma manera están surgiendo colectivos en Reino Unido formados por españoles y ciudadanos de otros países de la Unión Europea que están luchando para que sus derechos también sean protegidos. Tal y como adelantó este periódico días atrás, estas asociaciones ya se han puesto en contacto con colectivos como ‘Europats’ para aunar fuerzas y buscar alianza por un objetivo común: que los derechos de unos y de otros no se vean afectados por el brexit. Por el momento la incertidumbre es total aunque se espera que la próxima reunión que la Unión Europea celebrará el 29 de abril centrada en el brexit ayude a aclarar, al menos en parte, cuál será el futuro de cientos de miles de personas que se encuentran en uno u otro país en este momento.