‘Apagar’ incendios estudiando el clima

No es una manguera, ni un extintor, ni una bomba de agua, pero también ayuda a los bomberos a extinguir grandes incendios. Se trata de una estación meteorológica, una herramienta de gran utilidad que desde hace algunos meses está a disposición de los Bomberos del Levante.

Estudiar diferentes indicadores, como la temperatura, la humedad, la presión, la dirección y velocidad del viento o la cantidad de lluvia caída, facilita la complicada labor de los bomberos en algunas determinadas actuaciones, sobre todo en la intervención en incendios de grandes dimensiones.

Datos diarios
El parque de bomberos de Turre cuenta con una estación meteorológica de última tecnología que envía datos a un servidor de manea continua. “Conservamos miles y miles de datos que en un momento dado nos pueden ser de gran utilidad”, confiesa el jefe de Bomberos del Levante, Francisco Flores.

La estación es capaz de realizar complejos cálculos para obtener la evapotranspiración, las horas de frío, de sol y de heladas o los puntos de rocío, por ejemplo.

Con toda la información obtenida, resulta mucho más fácil conocer el comportamiento del viento, por ejemplo, si se produce un incendio. Además, cuando se producen lluvias torrenciales, los bomberos pueden disponer de datos exactos sobre la cantidad de agua caída, con todo lujo de detalle, con los que después pueden realizar informes para, por ejemplo, reclamaciones a seguros.

En cualquier sitio
La estación meteorológica envía cada dos minutos nueva información a una página web, abierta a la consulta pública, en la que se pueden ver varios parámetros básicos. “No mostramos todos los datos que se obtienen, solo algunos de ellos, pero nosotros sí que accedemos desde una plataforma a decenas de parámetros más que nos son de utilidad”, explica Flores.

De esta forma, los Bomberos del Levante tienen la información a su alcance desde cualquier lugar, simplemente consultando su teléfono móvil. Esto permite que, sea donde sea una actuación, puedan acceder a los datos meteorológicos que precisen para desarrollar mejor su trabajo.

Esta herramienta incluye anemómetro, para la velocidad del viento; veleta, para la dirección; radiómetro; pluviómetro, para las precipitaciones; sonda de temperatura y humedad; o barómetro, para la presión, entre otros.